Compromís exige saber el nombre de los siete miembros de la plantilla de Aerocas
El hijo del delegado del Consell en Castelló y concejal de Nules, Alejandro Borrás y la hija de la exsenadora Pardo están contratados por la empresa pública sin que se conozca ninguna prueba selectiva
Después de que ayer se hiciera público que la hija de la exdiputada y exsenadora del PP Carmen Pardo, Patricia Llopis Pardo, ocupa desde 2006 un lugar de técnicos en la empresa pública Aerocas, desde Compromís se ha exigido por vía parlamentaria saber el nombre del resto de la plantilla.
De los siete miembros que cobran 367.000 euros al año, sólo se sabe el nombre de Llopis Pardo, y de Alejandro Borràs, concejal del PP en Nules e hijo de delegado del Consell en Castelló, Ximo Borràs, el cual es jefe de Gabinete de Dirección del aeropuerto (también estaría ocupando el lugar desde 2006 como técnico), y la tercera persona conocida es el polémico director del aeropuerto, Juan Garcia Salas, que cobraría más de 55.000 euros al año.
"Se desconoce el nombre del otro técnico de grupo A que estaría desde 2006 acompañando a Patricia Llopis y Alejandro Borrás, así como al administrativo del grupo C, y de los dos auxiliares administrativos, pero vista la vinculación familiar y política de la plantilla de esta empresa pública, todo apunta a que Aerocas ha servido cómo agencia de colocación de familiares de dirigentes destacados del PP", según ha valorado hoy el coportaveu de Compromís a las comarcas de Castelló, Carles Mulet.
Mulet ha recordado precisamente que esta semana se denunciaba que desde mayo de 2005 hasta noviembre de 2011 se estuvo pagando 4320 euros al mes a un primo político de Alberto Fabra por el alquiler de un ático en la periferia de Castelló para albergar las oficinas de Aerocas, y que parte de los terrenos donde se ubicó el aeropuerto eran del padre del vicepresidente de la Diputación, Francisco Martínez. “Aquí el aeropuerto ha sido una ruina para todos los valencianos, pero hay quién lleva años viviendo de él o quienes se ha enriquecido gracias a esa operación, aunque no funciono ni tenga ninguna posibilidad de hacerlo a medio plazo”.
Desde Compromís se ha exigido saber el nombre de los cuatro contratados restantes y el proceso selectivo que pasaron para entrar a formar parte de la plantilla de la empresa pública “ todo huele demasiado a nepotismo y enchufismo”.
