La Diputación de Castellón paga cinco veces más rápido a sus proveedores que el conjunto de las administraciones en España
Un informe de Intervención demuestra que el plazo se ha reducido a 27 días en 2012 frente a los 141 días del resto de instituciones
Barrachina destaca “el esfuerzo que han hecho los diputados, así como todos los trabajadores, coordinados desde Intervención”
“No solo ya pagábamos antes que el resto en 2011, sino que el año pasado mejoramos la efectividad un 53%, frente al 13% nacional”
La Diputación de Castellón multiplica por cinco la eficiencia media de las administraciones públicas españolas a la hora de atender a sus proveedores. Así se desprende del informe elaborado por el departamento de Intervención de la institución provincial y contrastarlo con los datos publicados el jueves por la Plataforma Multisectorial Contra la Morosidad, que refleja que las administraciones pagaron a sus proveedores en 141 días el año pasado, mientras que la Diputación lo hizo en solo 27 días durante 2012.
Este dato es la constatación de que la línea de eficacia y gestión marcada por el presidente de la Diputación, Javier Moliner, continúa dando frutos al mejorar el plazo de pago a proveedores, algo fundamental para mejorar la confianza en la provincia.
Este compromiso se ha visto reflejado en todas las áreas de la institución, al mejorar el control y tramitación de las facturas, “pero también por el esfuerzo que hemos hecho para contener el gasto y reducir nuestra deuda, lo que al final ha repercutido en una notable mejora de nuestra liquidez y, por tanto, capacidad de pago inmediata”, ha explicado el vicepresidente responsable del área de Hacienda y Contratación, Miguel Barrachina.
En este sentido, Barrachina ha puntualizado, además, en que “no solo ya pagábamos antes que el resto a nuestros proveedores en 2011, sino que, además, el año pasado mejoramos nuestra eficiencia en un 53%, frente al 13% nacional”. Esto significa que el conjunto de administraciones públicas pasó de pagar en 162 días en 2011 a 141 días en 2012, mientras que la Diputación redujo el periodo de pago a proveedores de 59 días en 2011 a apenas 27 el año pasado.
Interés cero de demora
Otra consecuencia de este esfuerzo colectivo en la institución provincial es que a lo largo de 2012 se hayan asumido todas las facturas con un interés cero de demora. Esto quiere decir que ningún cliente ha reclamado intereses por el retraso excesivo en sus facturas, algo que es relativamente habitual en muchas otras instituciones públicas españolas.
El vicepresidente económico ha recalcado que “no solo mejoramos nuestra gestión en términos relativos frente al conjunto de España, sino también en los absolutos, a pesar de tener un margen de mejora mucho más reducido”.
Miguel Barrachina ha destacado que “la mejora de la gestión de los pagos es consecuencia del esfuerzo de los diputados en todas las áreas, pero también gracias a la dedicación de todos los trabajadores y responsables de los distintos departamentos, con una eficaz coordinación y control de las facturas desde Intervención”.
Un compromiso de calidad: el trámite más largo en solo ocho días
Esta situación es además consecuencia de las instrucciones emitidas en una circular que el vicepresidente del área Económica, Miguel Barrachina, dio el año pasado para que todos los diputados y responsables administrativos hagan un seguimiento exhaustivo de la trazabilidad de todas las facturas.
En las instrucciones dadas por escrito por Barrachina, siguiendo instrucciones de Javier Moliner y enmarcadas en la filosofía de máxima austeridad y eficacia implantadas por el presidente de la Diputación, insta a que los gestores de cada área evalúen la conformidad, o no, de la efectiva realización de cada servicio, obra o suministro, y tramiten factura en menos de ocho días hábiles. Una vez verificada la adecuada prestación del servicio, suministro u obra, la factura se remitirá a Intervención para que haga un reconocimiento de obligación en menos de cinco días y se pague también en cinco días hábiles como máximo.
Pero no solo la Diputación de Castellón está haciendo un considerable esfuerzo por pagar a todos sus proveedores en tiempo y forma, también lo están haciendo los organismos autónomos, que ya se han reestructurado para aligerar la carga administrativa y mejorar los servicios que se prestan desde la institución provincial. Así, el Patronato Provincial de Turismo, que es el único que va a mantener su estatus actual, asume sus compromisos en apenas 13 días.
Moliner vinculó su nómina al pago a proveedores como garantía
Para reforzar esta apuesta necesaria por la eficiencia y la gestión para que los proveedores de la Diputación puedan trabajar con absoluta tranquilidad, Javier Moliner vinculó el cobro de su nómina al plazo de pago de los servicios que recibe la Diputación. Hay que recordar que es el único cargo público de España que ha vinculado el pago de su sueldo a que haya cobrado hasta el último de los proveedores, en un esfuerzo por mejorar la confianza.
La morosidad, entendida como el retraso excesivo en el pago de facturas por obras y suministros de bienes y servicios, ha adquirido tal importancia, ante las deudas de las administraciones que arrastraban impagos de 2008, 2009, 2010 y 2011, que el Gobierno arbitró hace un año un plan de pagos de 35.000 millones para evitar que en 2012 cerrasen hasta 100.000 nuevas empresas por la creciente deuda pública. La Diputación de Castellón no tuvo que acogerse a este plan debido a su buena salud financiera y al seguimiento constante para atender todos sus compromisos.
