Colomer propone en la Diputación impulsar un plan estratégico de turismo tras registrarse los peores resultados de ocupación

Los últimos datos oficiales ponen de manifiesto que en el último año, entre noviembre de 2009 y noviembre de 2010, el turismo en España ha crecido un 7%, mientras que en la provincia de Castellón se ha producido un descenso del 15% de media (18% en viajeros, 12% en pernoctaciones, eliminado 577 plazas, se pasa de 52.476 a 42793 viajeros y de 142.820 a 124.984 pernoctaciones). Este pésimo balance ha llegado a Francesc Colomer a presentar una moción para corregir la política turística de la diputación y atender así a la petición del sector que está atravesando una grave crisis. Por ello, defenderá en el pleno del martes la necesidad de impulsar de forma urgente un Plan Estratégico de Turismo para la provincia de Castellón, por, para y desde el sector. Un Plan “que conjugue empresa y destinos, basado en productos, con respeto al territorio y a la identidad provincial y garantizando la participación de todos los agentes implicados”. Otra de las medidas que plantea es precisamente la de “crear un nuevo órgano de gestión eficaz, profesional, moderno y ágil, con visión de mercado y de futuro, orientado a ofrecer soluciones a las empresas y destinos castellonenses”.

Para Colomer, la caída de la ocupación es estructural, ya que no existe una alternativa clara a la oferta de sol y playa, ni una herramienta eficaz capaz de promocionar la provincia en su conjunto, lo que ha llevado a Castelló a ser la provincia de todo el litoral español con peores registros de ocupación hotelera (33,5%); sólo por delante de Lugo. La falta de políticas turísticas adecuadas también ha situado a la provincia de Castelló como la que tiene mayor índice de estacionalidad de todo el Mediterráneo con una estancia media de 2,92 días, inferior a la media autonómica (3,32).

Colomer apuesta por un turismo concebido “como fábrica de emociones: emociones originales, únicas, que solo se puedan vivir aquí”, y para ello “la promoción turística ha de experimentar un cambio drástico. Necesitamos conocer al cliente de forma personalizada. Podemos hacer una promoción más moderna, más profesional, más efectiva y más científica, desde la inteligencia de mercado. Necesitamos manejar mucha información sobre los mercados emisores y llegar puntuales a los cambios, a la evolución de las tendencias”. Una de las propuestas de Colomer, que precisamente hizo público en Fitur, feria que visitó esta semana acompañado de la vicesecretaria y portavoz de Asuntos Europes del grupo parlamentario, María José Salvador, además de la secretaria de Economía y portavoz de Industria, Amparo Marco y de Emili Obiol, también de la dirección provincial, es la de crear los observatorios turísticos (como el que ya existe en Benicàssim). Las nuevas tecnologías también juegan un papel importante en este ámbito y por eso ha destacado que la red ha tumbado el plano vertical y herramientas como Google nos organizan la vida y han democratizado las posibilidades de divulgación”.

Ha recodado que en 2010, el 70% de los turistas llegaron bajo la modalidad de viaje individual, frente a los grandes touroperadores, que orientaban, levantaban y tumbaban destinos y por eso “necesitamos apostar muy fuerte por los nuevos canales de distribución, por potenciar portales de internet”.