Cultura inicia los trámites para declarar Bien de Interés Cultural el barranco de los Molinos de Ares
El barranco de los Molinos debe su nombre a los cinco molinos harineros que se sirven de su agua como fuerza motriz y que fueron construidos en la segunda mitad del siglo XVIII.
El Molino de la Roca, el Molinet, el Molino de Dalt, el Molino de la Balsa Redonda y el Molino del Sól de la Costa contarán con la protección de Cultura, la cual se extenderá a la unidad paisajística formada por el barranco que limita los molinos y las vertientes de los montes que lo alimentan, así como los caminos más próximos.
Estos molinos son del tipo de rueda horizontal y forman cada uno de ellos una unidad hidráulica, con una balsa de retención del agua, una torre o rampa de caída de agua y la acequia de canalización de agua que los conecta.
La construcción de los molinos fue llevada a cabo por iniciativa de los grandes propietarios rentistas de las fincas agrícolas donde se ubican y de esta forma conseguir un conjunto que moliese la cantidad de trigo suficiente para la población creciente de una gran parte del término de Ares y de otros territorios vecinos.
La protección de los molinos y su entorno se concreta desde ahora en la necesidad de que cualquier intervención en este espacio necesite de la autorización de la Conselleria.
Asimismo, no se permitirá edificar ni mover tierras o excavar, de la misma forma que tampoco se autorizarán las señalizaciones de tipo publicitario, la tala de árboles, el almacenaje al aire libre de materiales y el vertido de residuos.