Cultura incoa el expediente de declaración como Bien de Interés Cultural de la Fiesta de la Santantonada de Forcall
Paz Olmos destaca que es una práctica festiva de indudable valor artístico y documental
La Santatonada consiste en una representación teatral popular de la vida de San Antonio Abad
La Festividad de san Antonio Abad es una de las fiestas con mayor implantación territorial en la Comunitat Valenciana, ocupando un lugar preeminente en el calendario festivo del invierno, ya que en torno a 300 municipios festejan al santo patrón de los animales de servicio y de compañía con algún tipo de prácticas, como hogueras, bendición de panes y tortas, bendición de los animales y representaciones de la vida del santo.
La directora general de Patrimonio Cultural Valenciano de la Generalitat, Paz Olmos, ha destacado que “la fiesta que Forcall dedica a san Antonio Abad reúne todos los requisitos para ser declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial. Es una práctica festiva que posee indudable valor artístico y documental, pues se trata de una representación de origen medieval con símbolos como el fuego y personajes del santoral y mundanos que se entrelazan en una serie de escenas que culminan cuando el santo vence al mal”.
Santantonada
La Santantonada consiste en una representación popular de la vida del santo, vinculada a una cabaña-hoguera donde aparecen una serie de singulares personajes. Este tipo de representaciones tiene uina considerable antigüedad, ya que la Baja Edad Media estuvieron muy extendidas por Europa.
La Santantonada recorre las principales calles del casco histórico de Forcall, en el desfile los demonios bailan frenéticamente al tiempo que conducen atados a una cuerda a los Santos (san Antonio y san Pablo ermitaño).
El éxtasis de la fiesta tiene lugar cuando la Santantonada llega a la plaza Mayor y a la barraca allí levantada. Los demonios persiguen a los Santos para hacerlos entrar dentro de la cueva, éstos se resisten, pero finalmente los demonios consiguen sus objetivos. Los santos son introducidos en la cueva y se prende fuego a la efímera construcción, es la muerte de San Antonio. Momentos después, els gaiters i tabalers hacen sonar melancólicamente sus instrumentos. Con el lamento de la gaita, todos los demonios se tiran a tierra, con las piernas levantadas y atacados de movimientos espasmódicos. El Santo resucita y la gaita devuelve la alegría al desfile.
Acaba la Santantonada con el lanzamiento de bengalas en el que participan todos los personajes. El caos acaba y la concordia vuelve a reinar. Los habitantes de Forcall y la gente venida de fuera también pasan por dentro de la barraca mientras se quema, rezando su oración y pidiendo el deseo, que todos aseguran que se cumplirá.
Una de las notas más características de la Santantonada, en la actualidad, es la participación popular. En este sentido, los vecinos de Forcall sienten la fiesta como un patrimonio común propio del conjunto de la población, bien desde el ámbito de las creencias y convicciones religiosas, bien por respecto y fidelidad a la secular tradición, bien por el sentimiento valorativo de aquello que la conceptúa como un tesoro cultural.
