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Colomer contrasta los libros de texto y la escuela de 0-3 años gratuita de municipios socialistas con la política de barracones del PP

    La ejecutiva provincial del PSPV-PSOE aprobó ayer en la Vall d'Uixó una resolución en la que afirma que la victoria socialista en mayo del próximo año hará posible un cambio en la política educativa en esta provincia para garantizar una educación pública y de calidad para combatir el fracaso escolar, que sitúa a Castelló sólo por delante de Ceuta, Melilla y Almería. El secretario general provincial del PSPV-PSOE, Francesc Colomer, ha manifestado que "la educación es el primer factor de progreso y de igualdad para construir una sociedad más justa y avanzada, y justo ahora en momentos de crisis, debe ser la base para constituir un modelo productivo para la provincia basado en la formación y en la innovación". Por ello, -continua Colomer- "es necesario que las instituciones valencianas inviertan en este área y que no la dejen de lado".

    El portavoz socialista en la diputación de Castelló ha recalcado que el PP ha fomentado una política educativa llena de olvidos que ha situado a nuestra provincia a liderar el fracaso escolar en España, solamente superada por Ceuta, Melilla y Almeria, ya que para el PP la educación no es un tema prioritario, malgastando recursos en eventos como la Fórmula-1. El resultado de esta política educativa del PP valenciano se traduce en que los alumnos estudian en barracones o en centros saturados; no hay oferta pública suficiente de 0 a 3 años al no crear ningún centro en Castelló dentro de la red de la Generalitat; los estudiantes de Castelló no tienen aulas informatizadas ni portátiles porque la Generalitat no quiso firmar el convenio del programa Escuela 2.0 con el Ministerio de Educación; el bono libro no cubre el total del coste ni la secundaria; no hay oferta suficiente para las personas paradas que quieren mejorar su formación y matricularse en institutos para estudiar formación profesional, en centros de adultos o en la escuela de idiomas, como también la reducción del número de profesores que provoca que aumenten los ratios por aula, se reduzcan grupos y que se eliminen programas de atención educativa destinados a paliar el fracaso escolar.

    Por todo ello, los socialistas consideran que urge de un cambio político en la provincia de Castelló que apueste firmemente por una educación pública de calidad con las construcciones necesarias para acabar con los barracones, con una distribución equilibrada de todo tipo de alumnado en los centros públicos, con una red de escuelas infantiles de 0 a 3 años gestionada por el Consell, y además con programas de innovación como el propuesto por el Ministerio de Educación, Escuela 2.0. Asimismo, una educación para toda la vida que atienda las necesidades de formación y reciclaje de personas adultas a la hora de acceder a un mercado laboral en continuo cambio.

    El secretario general provincial ha insistido en que "mientras la Generalitat da la espalda a las necesidades educativas de la provincia de Castelló, los ayuntamientos socialistas asumen competencias que no son municipales, sino de la Generalitat, y que demuestran que otro modelo educativo es posible y donde se benefician de servicios y prestaciones que otras localidad no disponen". El compromiso por la educación de alcaldes socialistas se manifiesta, por ejemplo, con la construcción de aulas y de centros escolares, competencia del Consell, como es el caso de la Pobla Tornesa que en 2008 construyó un aula en el colegio de primaria con fondos propios y este año ha ejecutado dos nuevas aulas gracias al Plan E y que ha permitido retirar los barracones instalados por la conselleria. Al igual que la apuesta por la educación de 0 a 3 años con la edificación de centros en la Pobla Tornesa, Benicàssim y Vinaròs. Otro de los ejemplos más claros que muestran el compromiso socialista con el ámbito educativo es la gratuidad de los libros de texto como lo hacen las localidades de Onda, Vinaròs, l'Alcora, Benicàssim y Morella. A esto hay que sumar la iniciativa de Benicàssim de dotar de cobertura wi-fi los centros educativos, aportar ordenadores portátiles y pizarras digitales, como también, el convenio firmado con el Colegio Oficial de Enfermería para asignar de enfermeras escolares los colegios de primaria. En otras localidades de la provincia encontramos también la apuesta por la formación de personas adultas, como es el caso de Almenara, que destina 150.000 euros al CFPA Paulo Frire para garantizar cursos de Graduado Escolar, acceso a módulos profesionales y preparación a las pruebas de acceso a la universidad para mayores de 25 años. El Ayuntamiento de Soneja subvenciona el comedor escolar y la Pobla Tornesa asume el 50% del coste anual; Onda y Vinaròs ofrecen el transporte escolar gratuito a los institutos y, también Benicàssim, la apertura de los centros con programas de la 'Escola Matinera' o en periodos vacacionales, o el 'Consell dels xiquets' de Morella que permite a los niños y niñas tener su visión de ciudad.

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