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Antonio Lorenzo destaca la apuesta del Gobierno por la política de becas y lamenta que Andrea Fabra utilice la Educación con fines partidistas

  • Considera incomprensible que el PP de la Comunitat Valenciana critique la inversión en ayudas al estudio cuando ocurre que Castellón encabeza el ránking nacional del fracaso escolar

El subdelegado del Gobierno en Castellón, Antonio Lorenzo, ha mostrado en la mañana de hoy su “sorpresa” y “malestar” por las declaraciones efectuadas por la diputada nacional del Partido Popular, Andrea Fabra, en las que acusa al Gobierno socialista de “fomentar la vagancia estudiantil y el pasotismo por becar a alumnos que han suspendido”.

El representante del Gobierno de España en Castellón, cree que “este tipo de declaraciones frentistas, que no tienen otro interés que el obtener rédito partidista, no deberían tener cabida en el legítimo debate político”. Considera que “resultan mucho más incomprensibles cuando las realiza la secretaria de Política Social del PP en la Comunitat Valenciana” ya que “para desgracia nuestra, resulta que la provincia de Castellón lidera el ránking del fracaso escolar en España”. Y esto sucede, “en una Comunidad como la valenciana, en la que la Generalitat tiene plenas competencias en materia educativa”.

Antonio Lorenzo está convencido de que “la política de becas supone un eficaz instrumento a la hora de elevar el nivel formativo de nuestros jóvenes, máxime en unos momentos de crisis como los actuales, en los que se impone una decidida apuesta por la sociedad del conocimiento”.

El subdelegado ha lamentado igualmente que el Partido Popular “tampoco haya querido arrimar el hombro por este país en materia de Educación, negándose a alcanzar un pacto de Estado con el Gobierno”.

Una vez realizadas estas consideraciones, Lorenzo ha recordado que recientemente el Gobierno ha aprobado un Real Decreto que establece los umbrales de renta y patrimonio familiar y las cuantías de las becas y ayudas al estudio del Ministerio de Educación para el curso 2010-2011, que reflejan la apuesta decidida del Gobierno por mantener la dimensión social de la educación y el fomento de la equidad y la igualdad de oportunidades. Entre otras medidas se aumenta el 3,5% de la cuantía destinada a ayudas al estudio para el próximo curso, con una inversión de 1.203 millones de euros para los cursos de la educación postobligatoria.

También se incrementa en 82 millones la partida conocida como beca salario, con la que se compensa la ausencia de ingresos que comporta la dedicación plena a estudios universitarios, lo que permitirá que el número de alumnos que se puedan beneficiar de esta beca salario se incremente en el conjunto de España en un 285%.

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