Y dale que te pego

Como ya he venido manifestando en mis más recientes artículos. Siguen sin cesar, las presiones – que no son otra cosa - al PSOE, y a su líder para que cedan en las posiciones adoptadas por el Comité Federal de este partido, tras siete horas de debates. “Y dale que te pego”, ahí siguen presionando con los más absurdos argumentos, para que el ¡NO!, que es ¡NO! a facilitar la investidura de Mariano Rajoy, decidido en el órgano de dirección socialista, se doblegue ante “la sinrazón” que se presume manteniendo esas equivocas propuestas, que son además hasta vergonzosas, cuando salen de la boca de algún ex – lo que fueran antaño.

La posición de Pedro Sánchez y del órgano de dirección, tomada ante la “Sesión obligatoria para la investidura” que Mariano Rajoy no puede evadir, sigue siendo el acuerdo más lúcido, y el único a mi juicio, que el PSOE debe adoptar en las actuales circunstancias de bloqueo parlamentario.

A esa situación, se puede sumar hoy, las legítimas dudas que algunos empezamos a temer. Que ante la incapacidad manifiesta de Mariano Rajoy quien acepto la tarea designada por el Monarca, al no lograr ni un solo escaño que no sean los de su partido, y como no tenga una mayoría favorable a su investidura, - que no la va a tener - nos vaya a sorprender con una negativa, con la anti-constitucional decisión de no presentarse ante el Pleno del Congreso de los Diputados para evitar la vergüenza de su incapacidad absoluta. De todo se puede esperar del señor Mariano.

Pero mientras, ahí siguen “Dale que te pego” presionando al PSOE, a su líder y al comité Federal del mismo para doblegar su actual posición, a favor de una actitud tan vergonzante, como lo son hoy, -en mi opinión- las presiones que se están realizando desde “Destacados ex de lo que fueron”, y desde los medios de comunicación donde la campaña anti-PSOE parece ser dirigida y orquestada desde los “Editoriales de El País”.

Y el problema ante esta situación, es uno solo para quienes plantean y exigen el apoyo a Mariano Rajoy: Es, si se apoya a Mariano Rajoy como Presidente del Gobierno a pesar de la corrupción y su mal gobierno o tenemos que ir a unas nuevas elecciones con la esperanza de unos nuevos resultados que hagan posible el cambio del gobierno y de políticas.

Y ese es, en mi opinión, el único problema. Pero esgrimir a estas alturas la necesidad del Presupuesto, de cumplir con los déficits, etc. con la situación tan catastrófica a la que no ha llevado Mariano Rajoy y su gobierno del PP, es ahora un escandaloso e inadmisible argumento, que no preocupo a quienes como el PP y Podemos votaron no a la investidura de Pedro Sánchez, cuando la situación económica era la misma, idénticamente tan agobiante como la que tenemos ahora. Cotica y agobiante, si señores pero gracias a Mariano Rajoy y a su Gobierno.

Pero ahora, por arte y milagro de no sé qué santo, nos aparece como un asunto de vida o muerte, por el cual se debe –según los inmorales que lo proponen– apoyar a Mariano Rajoy como Presidente del Futuro Gobierno. Eso es lo que quieren imponer con sus presiones: Antes un Gobierno de imputados por corrupción, que volver a consultar con las urnas, y que el PSOE reinicie su recuperación electoral - en mi opinión - bien merecida.

Cuando Mariano Rajoy y los presuntos politólogos, desde los medios aluden a los intereses del Estado, para cubrir sus miserables propuestas. Me recuerdan a aquel famoso Rey francés Luis XIV cuando afirmó “El Estado soy yo”, para dar a entender que en aquel entonces no había en Francia más poder, ni otra soberanía que la suya, esto es, el poder real, y esa es la fórmula que algunos monarcas después, han proclamado su omnipotencia y la NADA de los súbditos.

Esa histórica frase, que era la expresión más pura de la concepción autocrítica de la vida política. Significa que el gobernante encarna al Estado, que su voluntad es la suprema ley y que reúne en su persona todos los atributos y potestades estatales.

Pues una imagen parecida a la de LUIS XIV, me da la impresión, es la que está llevando a cabo Mariano Rajoy, confundiendo sus intereses, con los intereses del Estado, al exigir del PSOE que permita que el Gobierno de la corrupción y los recortes que se han practicado desde el PP, continúe en el Gobierno. Y eso es una inmensa falta de moralidad de quien emplee esos argumentos, y de respeto a la realidad, que no son precisamente de ningún modo, los intereses del Estado.

La Soberanía Nacional reside en el pueblo español, del que emanan todos los poderes del Estado, según reza en nuestra Constitución, y los que están mareando obstinadamente para que el PSOE facilite la investidura como Presidente a Mariano Rajoy, es que están demostrando que pasan hasta de la misma Constitución. Y el Estado somos todos los españoles, todos sin excepción, ni tan siquiera lo es el Rey, a pesar de ser el Jefe del Estado, que no es ser el Estado. Por lo tanto, los intereses del Estado no podemos dejar que nos confundan, porque son los intereses de todos los españoles.

Una entidad y un partido autoritario como es el PP, con gravísimas y ostensibles sombras de corrupción, y que ha desmantelado el Estado de Bienestar, y privatizado cuanto le ha venido en gana. Como si España fuera su cortijo. No puede ser votado por ninguna fuerza política con presencia en el hemiciclo del Congreso de los Diputados.

¿A ese Presidente y a ese partido hay que votarlo para que continúe Gobernando, por los intereses de Estado? Vamos como chiste, podría competir con los de Lepe.

Pero hay que ser serios, porque nos estamos jugando mucho. Y por eso hay que mandar a paseo a quienes sintiéndose que “El Estado son ellos” pretenden que el PSOE tenga que facilitar la Presidencia a Mariano Rajoy y de su Gobierno.

Y con esa campaña mediática, cuando no es Mariano Rajoy en persona, es desde los medios, que está sembrando entre la gente con una vergonzante complicidad de muchos y grandes medios de comunicación, el miedo entre la ciudadanía, por temor a que se produzca el lógico reconocimiento de la capacidad del PSOE como la alternativa de Gobierno, y se verifiquen los incrementos suficientes en los próximos comicios a las candidaturas socialistas.

Es desde las páginas de opinión de El País, y día a día, que no falta su contribución, más que a la información que le es propia, es la pretensión de decidir cómo tiene que actuar fundamentalmente el PSOE, en relación a permitir que Mariano Rajoy sea investido Presidente.

En el diario del lunes 15 de agosto, al leer en esa página de la sección de Opinión la editorial bajo el título “La ausencia del PSOE” uno se percata quien está haciendo de dirección de la orquesta mediática en la interpretación de la sinfonía “Todos contra el PSOE”.

Esa editorial, si bien empieza dándole la razón a Pedro Sánchez cuando dice que tiene el mandato del comité Federal del PSOE de votar NO a la investidura de Mariano Rajoy, no pierde ninguna línea para pasar a la ofensiva anti-PSOE al señalar la razón que les asiste a los ex-presidentes Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero al pedir un debate interno entre los socialistas.

Recurrir con esos argumentos, para seguir insistiendo-presionando para que el señor Mariano Rajoy sea investido como Presidente, es si se me permite, ridículo e inadmisible ¿Pero es que las siete horas de debate en el Comité Federal no son válidas por sus decisiones?

Que quiere El País, ser el director y cuatro más quien decida lo que tiene que hacer el PSOE.

Y siguiendo con “El dale que te pego”, abundan los “Argumentos ficción”. Que a juicio de El País son que cuando el Comité Federal acordó el NO a la investidura de Rajoy, este solo contaba con 137 escaños para someterse a la votación.

Pero ahora, según El País han sucedido en las últimas semanas dos hechos que modifican la situación política.

Agárrense a la silla para no caerse: El primero de ellos ha sido la decisión del Parlamento de Cataluña de avanzar en la hoja de ruta hacia la secesión, impulsada entre otros por la antigua CDC. Y claro ya había sobradas evidencias de la voluntad rupturista de ese partido, como para pensar en cualquier tipo de dialogo con los independentistas, que como aunque son de derechas, Rajoy no lo tiene claro.

Y por esa misma razón, tampoco va a ser posible, se ha esfumado la siempre inquietante opción de buscar votos entre los populistas de Podemos y los nacionalistas para conseguir una investidura del líder socialista, si llegada la ocasión, el Monarca se lo propusiese.

El segundo gran “acontecimiento” es la decisión de Ciudadanos anunciada la semana pasada, la posibilidad de cambiar su abstención por el voto positivo a Rajoy, siempre y cuando se cumplan las condiciones que le han expuesto al PP y que será el miércoles 17 que la Ejecutiva de este partido tiene que responder.

¡Vamos!, y que estos acontecimientos sean los determinantes para que el PSOE tenga que practicar el transformismo político, que se le exige a los socialistas. No tiene nombre, es como pedir que llueva hacia arriba.

Veamos, si de los posibles cambios en Ciudadanos, sin entrar en los contenidos con los que Albert Rivera va a intentar justificar, su ¡SI! a la investidura de Mariano Rajoy, no van a solucionar precisamente ese problema enquistado hoy como es “la investidura” sea quien sea el candidato. En el caso de Mariano Rajoy serán 169 escaños positivos al que habría que añadir el solitario escaño de Coalición Canaria. Si una situación completamente distinta, pero que no es, y no puede ser la solución para la investidura deseada de Rajoy, por faltarle al menos 11 abstenciones para que se formara Gobierno.

Y he aquí “los intereses de Estado” por los que se está exigiendo al PSOE que facilite la investidura del Señor Rajoy. A mí me parece que son los intereses políticos, de quienes están confundiendo los interese del Estado con los suyos personales. Que no tiene nada que ver ya, desde hace algún tiempo, con los interese de los parados, del trabajo precario y mal pagado, de las pensiones en peligro, las desigualdades, la pobreza, los recortes y la descomunal deuda a la que nos ha obligado a contraer Mariano Rajoy y su Gobierno.

A Felipe González, y a otros cuya existencia económica y social está en otras latitudes, lo mejor que deberían hacer es permanecer callados, que sería una acertada manera de no hacer el ridículo y de no malgastar el prestigio que algún día acumularon.

Y a los que están jugando con el miedo, habrá que decirles, que lo que está llamando a la puerta de toda Europa, es el fascismo, que puede alcanzar unos resultados peligrosísimos en las próximas elecciones europeas.

Y hoy, aguantar los desmanes de la derecha neo-liberal lleva a este camino, y de este, al siguiente, a terrenos temibles. Se empieza por quitar la democracia y los derechos, como se ha hecho en España, y enseñando a la gente que no la mamo, y ni la quieren, pero que de Estado nada, que es el PP. quien va decidir “nuestro maravilloso futuro”.

Por eso, hay que advertir a la gente, que si se cree estas historias del PP, y les sigue votando, que así vamos más al hondo. Y que abran un poquito bastante los ojos de su cerebro, porque están siendo cómplices de todo cuanto nos ocurre.

Pero mientras “El dale que te pego”, no va a parar hasta que los resultados de unas nuevas elecciones transformen las bancadas del Congreso de los Diputados, en palancas de progreso y reformas de un nuevo Gobierno que no puede ser el de Mariano Rajoy.