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Por José Luis Esteban
Andanada de sol - RSS

Desilusión, impotencia y rabia

    En cuanto me enteré por los portales taurinos de Internet de los carteles de la Feria de la Mercé de Barcelona me ilusioné con ellos y decidí ir a pasar allí un fin de semana taurino muy especial, en compañía de mi esposa e hija y otros amigos muy aficionados.

    Aunque los dos carteles son muy buenos me quedo con el del sábado día 24 con toros de Núñez del Cubillo para Morante, El Juli y Manzanares; ahora, una vez allí, por supuesto también hubiera ido a ver a Juan Mora, José Tomás y Serafín Marín con toros del Pilar. Los dos carteles son de auténtico lujo, además con el agravante del cierre de la temporada taurina de Barcelona, y si la cordura no lo remedia, de la propia plaza Monumental de la Ciudad Condal.

    El problema ha sido cuando he querido conseguir entradas, dándome cuenta del montaje maquiavélico que se llevan.

    Como es lógico, nada más saber del cartel me puse en contacto con las taquillas de la plaza, allí me contestaron que todavía no estaban a la venta. En el momento que me enteré de su venta volví a llamar a taquillas, una y otra vez, lugar donde se supone que debes contactar para la compra de entradas, bueno pues todavía aun no me han vuelto a coger el teléfono , a pesar de mi insistencia diaria.

    Probé en Tauro entrada de Internet, allí el portal siempre estaba bloqueado o no operativo. Llamé a un número de teléfono que aparecía en Mundo toro y en Aplausos. Era un número de los que pagas bastante por tiempo en línea y te entretienen con múltiples preguntas hasta que te dan una respuesta que al final no llegó. Intenté pedir algún favor a mis contactos taurinos y a algún que otro amigo influyente y me dijeron que era totalmente imposible conseguir entradas para las corridas solicitadas, que antes de salir a la venta en taquillas, prácticamente ya las tenían distribuidas y vendidas a mayoristas de hoteles de Barcelona. Contacté con una agencia de viajes y me contestaron que sí tenían, pero a un precio desorbitado, ya que si querías la entrada tenías que dormir obligatoriamente en el hotel reseñado, puesto que eran los de los hoteles quienes disponían de las entradas. Éstas se vendían a precio de taquilla o a un diez por ciento más caro, pero el precio de la habitación era prohibitivo.

    Opino que han abusado de la buena voluntad de los aficionados de a pie, de los que solemos acudir a muchas plazas haya cartel de relumbrón o no y que a la postre somos los que con nuestro granito de arena cada uno vamos manteniendo esta degradada fiesta de los toros. Si que me consta que el primer día de venta de entradas se podían adquirir en taquillas tras aguardar la interminable cola que allí se formó, pero los muchos aficionados que no residimos en Barcelona, habiendo entradas de sobra, si no pasas por el aro de la reventa o del negocio sucio hotelero, nos hemos quedado sin entradas.

    Así no se beneficia ni a la Fiesta Taurina ni a la afición, tan solo salen beneficiados unos desaprensivos empresarios y toda la mafia corrupta de la reventa de Barcelona.

    Como a mí, les ha pasado a otros muchos aficionados de toda España. Aficionados que como yo, hemos colaborado a favor de la Fiesta de los Toros en Cataluña recogiendo un montón de firmas para la ILP y siempre defendiendo la libertad del aficionado, y es una lástima que para cuando decides ir a Barcelona a ver los toros te den con la puerta en las narices.

    Dicen que ha habido peticiones para llenar tres Monumentales. Eso no está mal, si no todo lo contrario, y si las entradas las hubieran distribuido en TAQUILLAS y por orden de petición, me hubiera parecido justo y correcto. Pero no ha sido así y lo que no se debe permitir es que te cobren por una entrada un precio superior al establecido, pues a eso se llama robar.

    En estos casos en que se supone que la plaza estará a reventar, se deberían televisar estas corridas por el bien de la afición y de la Fiesta de los Toros.

    Imagínense televisada en abierto, desde la Monumental de Barcelona, la Feria de la Mercé con estos carteles de lujo y con la plaza a reventar de espectadores. Tal como está la Fiesta, ¿no creen que ésta hubiera sido una buena fórmula para promocionar los toros en Cataluña y demostrar que la mayoría de la gente desea que no desaparezcan las corridas de toros?

    ¿Dónde están los profesionales taurinos y los propios espadas que torean este fin de semana en Barcelona? Son los mejores del escalafón, la plaza estará llena hasta la bandera. Sus bolsillos también porque se lo merecen. Pero ¿Qué hacen ellos por promocionar La Fiesta? ¿Qué hacen ellos por los aficionados?

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    comentarios 2 comentarios
    vicentboschipaus
    vicentboschipaus
    23/09/2011 07:09
    Entrades.

    La venda d'entrades no és cosa dels barcelonins ni dels catalans. Es un fet empresarial "orbe et urbi".

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