Oltra dará la cara en les Corts por la condena de su exmarido por abusos a una menor
La vicepresidenta ha usado su perfil en Twitter para anunciar que ha solicitado una petición de comparecencia
Mónica Oltra mueve ficha tras conocerse la sentencia de la Audiencia Provincial de Valencia que condena a su ex marido a cinco años de cárcel por abusos a una menor de edad tutelada por la Generalitat Valenciana.
La vicepresidenta ha anunciado que ha presentado una petición de comparecencia en les Corts Valencianes a petición propia “para dar todas las explicaciones sobre esta sentencia, la actuación de la Conselleria y de mí como consellera”.
Así lo ha anunciado Oltra en su cuenta de Twitter porque “en mi trayectoria personal y política siempre he dado la cara y ahora no va a ser una excepción”.
Así, “cualquiera podrá preguntar lo que considere” aunque Mónica Oltra apunta que su comparecencia será una oportunidad para “comprobar si el verdadero interés mediático y delos diputados es sobre la víctima, los hechos o la sentencia, o culpabilizarme a mí por extensión de algo que no he hecho yo”.
Además, señala que “no me puedo permitir ni como mujer, ni como madre, ni como consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas una sociedad que sigue culpabilizando a las mujeres y a las familias de hechos de los que no somos responsables”.
Los hechos se produjeron a finales de 2016 y principios de 2017, cuando Luis R, exmarido de Mónica Oltra, era educador del Centro de Acogida Niño Jesús de Valencia.
Tras una primera sentencia condenatoria contra Luis R., el juicio se tuvo que repetir parcialmente para estudiar y analizar unos informes presentados por la Conselleria de Igualdad que pretendían exculpar al acusado y poner en duda la versión de la víctima.
No obstante, la Audiencia de Valencia ha ratificado la primera condena y concluye una pena de cinco años de prisión por un delito continuado de abuso sexual a una menor de edad tutelada por la Generalitat Valenciana.
La sentencia también recoge que Luis R. queda inhabilitado para desempeñar cualquier profesión que conlleve un contacto con menores de edad durante los próximos diez años, además de la obligación de participar en cursos formativos de educación sexual.
