Les Corts aprueban instar al Consell a promover que los empleos del Plan de Garantía Juvenil sean dignos y de calidad

Les Corts Valencianes han aprobado una proposición no de ley presentada por Podemos que insta al Consell a incluir criterios de calidad en los puestos de trabajo que se oferten en el marco del plan de Garantía Juvenil, iniciativa que según el diputado de este grupo parlamentario, Antonio Estañ, era buena en su origen, pero tiene “unas consecuencias pésimas al desarrollarlo dentro de la forma que tienen algunos de entender el empleo: precarizándolo, aumentando horas y bajando salarios”.

El parlamentario ha criticado que la gestión que el PP ha hecho de este plan ha provocado que no se cree empleo para los jóvenes, sino que se subvencione con dinero público la precarización del mercado laboral, “fiándolo todo además a la figura del emprendedor que acaba culpabilizando y frustrando al desempleado”.

Tras transaccionar la iniciativa con el grupo socialista y con Compromís, Les Corts  han aprobado, con la abstención del PP y Ciudadanos, instar al Consell a crear una oficina de coordinación que realice un correcto seguimiento del Plan de Garantía Juvenil mejorando su implementación de cara al próximo examen de rendimiento por parte de la Comisión Europea mediante el diálogo y la participación de los principales agentes implicados y representantes de la juventud, para garantizar una mejor gestión y control de los recursos europeos, así como que se incluyan criterios de calidad en los puestos de trabajo que oferte el citado plan, que se promueva el empleo de calidad a través de campañas efectivas y que se garanticen los derechos laborales.

La Garantía Juvenil es una iniciativa de la Unión Europea que data de 2013 y tiene  como objetivo que los alrededor de 850.000 españoles jóvenes entre 16  y 29 años que no estén cursando estudios, formación ocupacional o no  tengan empleo puedan recibir una oferta de empleo o formación tras haber  finalizado sus estudios o quedar desempleados.

Estañ, ha defendido ante el pleno de Les Corts que esta iniciativa surgió gracias la presión de los consejos de la juventud de los países nórdicos, donde existe 1981 como un derecho universal y ha explicado que la diferencia de más de 20 puntos en la tasa de paro juvenil entre la media de los estados miembro y países como España, Grecia o Italia, sumado al desigual reparto del gasto social, marcan una clara brecha entre cómo ha afectado el periodo de crisis sobre los jóvenes en el norte y el sur de Europa. Esto, ha lamentado, coloca a los jóvenes como “los grandes perdedores de la crisis” con las consecuencias estructurales que esto supone para el estado del bienestar.

A España se le dotó con casi un tercio del plan  --1.800 millones de euros --, pero debido a la poca y mala difusión y escasa y poca coordinación con las autonomías solo se inscribió un 10 por ciento del público objetivo, según ha relatado el parlamentario.

Tampoco se han cumplido los plazos de 4 meses establecidos por ley en obtener respuesta “y lo más importante – ha proseguido—es que se ha contribuido con fondos europeos a precarizar la situación de los jóvenes”.

Estañ ha explicado que la UE emitió un informe evaluando la ejecución de la garantía juvenil preparando una nueva inversión, “informe que nos dejaba en muy mal lugar señalando estos aspectos y que ocasionó que hace unos días el congreso, como malos estudiantes, aprobaron un decreto de medidas de corrección que reducen los requisitos y modifica bonificaciones, pero que son manifiestamente insuficientes en tanto que siguen estando integradas en esa visión del empleo, no han aportado dialogo social y no van a los aspectos estructurales”.