Morella denuncia que la residencia de la localidad no ha sido tenida en cuenta en los presupuestos de la Generalitat
El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, y la concejala de bienestar social, Malú Blasco, han mantenido una reunión con la dirección de la residencia San Juan Bautista de la localidad, tras percatarse de que con los presupuestos de la Generalitat de 2015 se generaría un déficit para el centro residencial de medio millón de euros. Esto se debe a que se ha presupuestado la misma cantidad que en 2014 y no se ha tenido en cuenta la aportación de los usuarios, que a partir del 1 de enero cobrará la administración autonómica. De esta forma, la consignación es de 800.000 euros, en vez de 1,3 millones de euros. Para el alcalde de Morella, este hecho denota “la mala gestión de la Generalitat” y exige que se solucione inmediatamente el problema.
El primer edil morellano participó hace unos días en una reunión en Les Corts con diputados del Grupo Socialista, alcaldes y empresas gestoras de centros relacionados con los servicios sociales. A raíz de estos encuentros, se detectó la falta de presupuesto para la residencia y el responsable de bienestar social de este grupo, José Manuel Sánchez, trasladó el hecho a la conselleria de Bienestar Social.
Rhamsés Ripollés también ha enviado una carta a la consellera, para exigirle la adopción de las medidas necesarias para asignar la cantidad correspondiente a la residencia y para mostrar la preocupación del Ayuntamiento de Morella por este nuevo sistema de gestión que va a implantar la Generalitat. Cabe recordar que el cambio que va a realizar la administración autonómica entrará en funcionamiento a partir del 1 de enero, y con éste, ingresará directamente la cantidad que los usuarios pagan a los ayuntamientos o empresas gestoras de los centros.
Esta medida no se ve con buenos ojos desde Morella, ya que el consistorio y las hermanas de la Consolación dejarían de ingresar la parte de los usuarios del Centro de Día y la residencia, respectivamente, siendo la Generalitat, administración que acumula grandes deudas y retrasos en los pagos especialmente de la parte subvencionada de los servicios sociales, la que debería abonarla.
El primer edil morellano señala que “esta desviación presupuestaria es injustificable e inasumible y demuestra que la implantación de este sistema de gestión en servicios sociales se ha hecho sin transparencia y con graves errores”. En este sentido, añade que “este nuevo sistema de gestión dificultará sobremanera la gestión de centros de mayores y dependientes y atenta contra la estabilidad presupuestaria y económica de los ayuntamientos y empresas que gestionan estos centros”.
Además, recuerda que “la Generalitat tiene graves problemas económicos, especialmente en la Conselleria de Bienestar Social, y ahora pretende que los ayuntamientos y empresas gestoras de estos servicios la financien a toda costa, sin plantearse que los retrasos en los pagos pueden hacer peligrar los distintos centros”. Hay que señalar, que esta medida se aprobó ayer de espaldas a los ayuntamientos, sin ningún tipo de diálogo y después de que el Grupo Popular de les Corts presentara una enmienda a los Presupuestos de la Comunidad Valenciana para 2015.
