El Conservatorio de Llíria deja de funcionar como organismo autónomo para depender directamente del propio Ayuntamiento

El Conservatorio de Música de Llíria dejará de funcionar como organismo autónomo administrativo para depender directamente del propio Ayuntamiento. El pleno acordó anoche la disolución del régimen de funcionamiento que se había utilizado hasta ahora.

El concejal de Cultura y Educación, Salvador Oliver, ha explicado que esta medida “se toma buscando la mayor eficiencia administrativa, ya que la organización autónoma resulta mucho más compleja que la gestión directa por el Consistorio. Además, la adecuación de los estatutos del Conservatorio al régimen jurídico actual supondría la creación de la figura de un gestor que conllevaría un incremento de los costes del centro”.

Igualmente, el edil ha destacado que este nuevo sistema de gestión “no irá en detrimento de la calidad del servicio. Se seguirá manteniendo la misma línea educativa y será respetada totalmente la autonomía pedagógica del centro”.

Consejo Local de la Música
Asimismo, el pleno aprobó la creación del Consejo Local de la Música. Este órgano consultivo y de participación de las sociedades musicales tiene como fines la promoción y fomento de las enseñanzas musicales y de todas aquellas actuaciones municipales relacionadas con la música.

Salvador Oliver ha señalado que este nuevo organismo “asume las funciones del Consejo Rector del Conservatorio, con el fin de seguir escuchando las opiniones de nuestras sociedades musicales, en una ciudad donde es tan importante todo lo relacionado con la música”.

El Consejo Local de la Música estará integrado por el alcalde, los miembros de la Comisión de Cultura, un representante de cada una de las sociedades musicales del municipio y el director del Conservatorio Municipal.

Acuerdo sobre el “parany”
Por otro lado, el pleno aprobó sendas mociones de los grupos PP y PSPV en defensa del “parany”. En estos acuerdos se solicita a la Conselleria de Cultura la declaración de este tipo de caza como un elemento de la cultura tradicional valenciana y que Les Corts adecuen la Ley de Caza vigente, donde se regula esta práctica, de acuerdo con los estudios científicos aportados por APAVAL.