La huelga indefinida del transporte continúa con movilizaciones en la Comunitat
Con una marcha lenta organizadas en varios municipios, los transportistas claman por el auge en los precios del combustible
Los transportistas de la Comunitat Valenciana están participando en una marcha lenta en esta segunda semana de la huelga del transporte. Tractores, camiones rígidos, furgonetas y coches, todos están saliendo a la calle en un lunes lluvioso para protestar por la asfixia que sufre el sector por la subida del combustible y por las mejoras laborales que reclaman estos trabajadores y autónomos.
Los transportistas denuncian la “precariedad” que sufre el sector ante una situación que califican de “insostenible”.
Con esta huelga indefinida, que arranca ya su segunda semana, la Plataforma nacional de defensa del sector del transporte de mercancías por carretera nacional e internacional, ha llamado a las movilizaciones, eso sí, pacíficas, porque “estamos trabajando con precios de los portes de 2003, con el combustible al triple de precio que esos años, con un gran incremento del precio de neumáticos y talleres”.
Hay movilizaciones en Riba-roja del Turia y también en Castelló de la Plana, con marchas lentas de camiones y vehículos para hacerse ver.
Es más, afirman que “dimos el callo en plena pandemia donde éramos héroes pero trabajamos en condiciones lamentables y sin rechistar, donde en algunos sitios nos trataban como infectados, que cada vez nos complican más nuestras labores para desarrollar nuestra faena”.
Además, aseguran que 2l sector lleva años “quemado”, casi “en quiebra”, con una precariedad laboral importante y con el convenio congelado desde 2009. A todo esto hay que sumar la escalada del precio del combustible. A un transportistas llenar el depósito le cuesta cerca de 2.000 euros por lo que “salimos a pérdidas”.
Principales motivos de la huelga indefinida
La subida del precio del combustible ha sido la gota que ha colmado el vaso, pero la plataforma nacional en defensa del sector del transporte ha elaborado unas exigencias para negociar con el Gobierno de España.
La falta de interés y compromiso por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, y al Ministerio de Trabajo y Economía Social ha llegado a los trabajadores y empresas a aparcar sus camiones a la espera de que el Gobierno atienda sus reclamaciones.
Las principales exigencias del sector son no trabajar por debajo de los costes de explotación, pago máximo a 30 días sin posibilidad de pacto en contra, solicitar un convenio nacional para que no haya desigualdades en salarios dependiendo del área geográfica, adelantar la jubilación a los 60 años, que se reconozcan como enfermedades profesionales las derivadas de su profesión al igual que los accidentes de tráfico, seguridad y vigilancia por parte del Estado en áreas de descanso y polígonos industriales, espacios acondicionados para alimentación e higiene en las zonas de carga y descarga, además de eliminar la carga y descarga por parte de los conductores, entre otras muchas reclamaciones.
