El Arzobispo destaca “el regalo de la familia y el don de los hijos”, en la parroquia Sagrada Familia de Gandia

El arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, destacó este domingo, en su visita a la parroquia de Sagrada Familia de Gandia, “el regalo de la familia, de vivir dentro de ella la fe” así como “el don de los hijos, que son acogidos en el amor de los padres”.

En la misa celebrada en Gandia con motivo de la Jornada de la Sagrada Familia,  mons. Benavent “aseguró que estaba impresionado por el conjunto artístico de las vidrieras que bendijo y por la acogida en el templo, lleno de familias de todas las parroquias de la ciudad”, señala el párroco Juan José Monfort.

En la homilía, el Arzobispo remarcó “la importancia de la familia y de que la fe forme parte de la vida diaria dentro de ella” y sobre los hijos subrayó que “nunca son una desgracia y no son una posesión nuestra” y recordó “el deber de los padres de acompañarles en su crecimiento y ser fieles a la vocación que Dios haya dispuesto”.

En la celebración de la Jornada de la Sagrada Familia -que tuvo lugar el 31 de diciembre y que la parroquia trasladó para facilitar la participación de los feligreses-, el Arzobispo renovó las promesas matrimoniales de 90 matrimonios de Gandia, que participaron en la misa con sus hijos y con el resto de la feligresía.

Ésta ha sido la primera visita de mons. Benavent a la parroquia en el día de la fiesta de su titular, día también “de la Iglesia doméstica y primera célula de evangelización, fundamentada en el sacramento del matrimonio”, precisa Monfort.

La misa fue amenizada por la Coral parroquial y en ella tomaron parte varios sacerdotes párrocos de Gandia, así como el alcalde de la ciudad y autoridades. 

Nuevas vidrieras, “catequesis para nosotros y generaciones futuras”

Mons. Benavent bendijo las nuevas vidrieras de la parroquia, realizadas por los Talleres Cervi, de Humanes de Madrid, que “quieren servir de catequesis para nosotros y para generaciones futuras”, según Monfort.

El proyecto de sustitución de los ventanales existentes en el templo, “que se habían vuelto opacos, y de sus estructuras deterioradas”, comenzó hace dos años. Ahora, un total de cinco vidrieras presiden la parroquia en la serie llamada “La Plenitud de la Carne”, que recorre, a modo de catequesis, la creación del hombre y la mujer, el pecado, el misterio de la Encarnación y Nacimiento de Jesús, la Pasión y muerte en la Cruz, la Resurrección y el cielo.

El Arzobispo también inauguró y bendijo las dos nuevas vidrieras de la entrada, obra del mismo taller, en las que puede verse una familia que se acerca a Jesús y el pasaje donde Jesús pide que dejemos que los niños se acerquen a Él.

Está pendiente la instalación de las cuatro vidrieras de la Capilla de la Comunión, un conjunto catequético sobre la Eucaristía de las que dos de ellas ya están en avanzado estado de ejecución.

Por todo ello, el párroco de Sagrada Familia de Gandia agradece a todas las personas implicadas “su ayuda para arreglar y embellecer el templo con su generosidad, esfuerzo y colaboración” y añade: “de nada valdría este esfuerzo si no mostramos el mismo o mayor interés en moldearnos a imagen de Jesucristo, reconstruyendo nuestro templo corporal en piedra viva de la Iglesia Santa y construyendo una comunidad de discípulos evangelizadores y misioneros”.