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UPyD impugna ante el Consell la recalificación del ‘Pepico Amat’

  • González realiza una “advertencia de ilegalidad” ante el posible incumplimiento de varias leyes

El grupo municipal de UPyD en Elda ha impugnado hoy ante la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente la recalificación a terciario comercial del los 27.000 metros cuadrados de suelo deportivo del estadio de fútbol Pepico Amat, cuya modificación aprobó el pleno del pasado 1 de marzo con los votos del PP y PSOE.

En la alegación que presenta el concejal César González se realiza una “advertencia de ilegalidad” ante el posible incumplimiento de una serie de aspectos fundamentales de la legislación urbanística y comercial. Como ya hiciera en el pleno, González ha pedido al concejal de Urbanismo que “se comprometa a dimitir si al finalizar la legislatura el centro comercial no ha salido adelante, porque a nuestro juicio es inviable técnica y económicamente, además de ser un promesa electoral que, como otras muchas del PP, resultan poco creíbles”.

Detalladamente, en el dossier remitido al Consell se indica que la modificación carece de los informes económicos que obligan a incluir las leyes respecto a la afectación para la hacienda pública de la reposición de las instalaciones deportivas del complejo, que albergan un estadio para 8.000 personas, otro campo de fútbol de tierra, vestuarios, dos pabellones cubiertos destinados a varias disciplinas deportivos y escuelas deportivas municipales. Esto, indica el edil, “hace inviable un equilibrio económico capaz de rentabilizar la construcción de un centro comercial para cualquier inversor privado”.

A este respecto, la modificación habilita 40.000 metros cuadrados de suelo deportivo en la zona de El Sapo, donde no hay autorización para construir las dotaciones deportivas que tienen que edificarse como compensación a la ciudad, no se garantiza el acceso peatonal para los posibles usuarios y existe un bloque de viviendas marginales, además de presentar una complicada orografía, estar cruzado por dos ramblas y ser suelo urbanizable no programado.

Por tanto, González considera que la decisión adoptada “atenta contra la ordenación estructural de la ciudad, donde hay una equipamiento deportivo consolidado que constituye un sistema general de equipamiento deportivo, sin haber valorado su repercusión económica en la hacienda local”. El Pepico Amat actualmente es un patrimonio municipal y sólo se puede destinar a “usos de interés social, por lo que difícilmente podría acoger un centro comercial”.

Igualmente, se indica que la modificación adolece de los preceptos que establecen las leyes de comercio, porque en la ficha de la modificación no se incluye el “uso comercial” de forma diferenciada. Los usos admitidos son los siguientes: hotelero, hostelero, oficinas, socio-cultural, sanitario-asistencial, deportivos y similares.

El procedimiento, además, se ha realizado al margen de la Guía de las Actuaciones Territoriales Estratégicas de la Comunidad Valenciana, de acuerdo a la ley 1/2012 de Medidas Urgentes de Impulso a la Implantación de Actuaciones Territoriales, que regula la figura de las Actuaciones Territoriales Estratégicas.

Además, la modificación “atentaría” contra el informe de la dirección general de Evaluación Ambiental y Territorial de marzo de 2012, donde remite la recalificación a la revisión del nuevo Plan General, que no está redactado y está en su fase de participación.

González ha destacado que en definitiva y “dadas las quejas que manifestó el edil Amat en el pleno acerca de la falta de alegaciones de UPyD a la modificación durante su aprobación inicial, hemos decidido que el mejor modo de complacerle es realizar una impugnación a la totalidad de la modificación en su fase provisional, esperando así que nuestro comportamiento resulte de su agrado y vea que nosotros cuando detectamos actuaciones que no creemos beneficiosas para la ciudad, acudimos al órgano competente para que actúe”.

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