UPyD anima a los hosteleros a alegar contra la nueva ordenanza de terrazas

El grupo municipal de UPyD en Elda ha animado hoy a los hosteleros a “inundar” el Ayuntamiento con alegaciones contra la nueva ordenanza de terrazas aprobada en el pleno de febrero, trámite que se podrá realizar una vez se publique en el Boletín Oficial de la Provincia. El edil se ha brindado a facilitar una copia a todo aquel establecimiento que se lo pida para ayudarle a agilizar los trámites, puesto que tras su aprobación definitiva tendrán un plazo de dos meses para regularizarse.

El portavoz, César González, ha lamentado que el PP se negara a admitir la petición de su grupo para que el texto quedara sobre la mesa hasta la subsanación de los “muchos errores” que contiene, puesto que su aplicación es “de imposible cumplimiento”. El edil responsable del área, Vicente Amat, se negó a contestar a la propuesta y a las preguntas que le hizo UPyD sobre este tema en el pleno y ha sacado adelante el texto “en solitario y por las bravas, algo por lo que tendrá que dar muchas explicaciones a los afectados”.

Además, González ha advertido a los ciudadanos que “se preparen para pagar los cafés en terraza a dos euros, porque si a los hosteleros les obligan a cumplir todos los requisitos que plantean y a pagar las fianzas e impuestos que se reflejan con “evidente afán recaudatorio, nos va salir más barato ir a las terrazas de Alicante, algo que los hosteleros y los ciudadanos tendremos que agradecer al PP”.

Así las cosas, hasta ahora los establecimientos se acogían a la ordenanza fiscal de 1993, donde se regulaban el precio público por la ocupación de la vía pública, pero ahora se crea una de fianza de 300 euros por cada cuatro mesas y 50 euros por cada una que se añada, al margen de las nuevas condiciones de obligado cumplimiento. Por citar algunos ejemplos, las estufas o los juegos infantiles necesitarán autorización y las jardineras quedan expresamente prohibidas.

MARQUESINAS ILEGALES
Igualmente, llama la atención que ipso facto quedan desautorizados los cerramientos verticales, salvo excepcional informe técnico, en todas las zonas de la ciudad independientemente del ancho de acera. González se pregunta por ello qué hará el PP con las marquesinas que se han construido y consolidado en zonas como la Gran Avenida, Padre Manjón o Alfonso XIII, “donde los propietarios han hecho inversiones importantes porque se lo han permitido y ahora resulta que de un plumazo están fuera de la legalidad”. “Resulta llamativo que la decisión de legalizarlas o no queda al libre albedrío del responsable de turno, con lo que se dejan las puertas abiertas a la arbitrariedad y a los favoritismos”, ha manifestado el edil.

Tampoco se explica qué pasara con las terrazas de la Plaza Mayor, pues según la ordenanza sólo se puede ocupar la longitud de la fachada, cuando en esa zona se tiende a ocupar el fondo de la plaza según las propias necesidades de los usuarios.

Otro elemento que queda sin regular adecuadamente son los medios técnicos que se aplicarán para vigilar el efectivo cumplimiento de la norma, dado que no queda reflejado con claridad si la inspección dependerá de la Policía Local o los técnicos municipales.

Por todo ello, González ha indicado que “como el PP tiene por costumbre no hace caso a nuestro grupo político, la única forma que tendrán los locales de dejar constancia de su malestar es llenando el Ayuntamiento de alegaciones, si es que quieren garantizar la rentabilidad de sus negocios ante una ordenanza que nace desde la imposición y sin diálogo con la sociedad”.