Mayor apaga el luminoso de la montaña para frenar el despilfarro energético
El nuevo alcalde de Cullera, Jordi Mayor, ha ordenado a los técnicos municipales que procedan al apagado del cartel luminoso de la montaña como primera medida para frenar el despilfarro energético que sufre en estos momentos la ciudad.
La iluminación de las letras con el nombre de la población fue uno de los grandes proyectos del anterior equipo de gobierno del Partido Popular que ha tenido un elevado coste para las arcas municipales, empezando por la instalación y acabando por el pago de la factura eléctrica, asumida desde 2013 íntegramente por el consistorio con un gasto anual de 6.000 euros que el actual ejecutivo considera innecesario.
Las luces se apagaron ya el viernes después de que durante las conversaciones para el traspaso de poderes el nuevo alcalde pidiera que se tomara esa medida. No obstante, Mayor ha señalado hoy que llevará al asunto a la Junta de Portavoces porque su voluntad es que se consensúe una solución con el resto de fuerzas políticas.
La intención del alcalde es que las luces estén apagadas la mayor parte del tiempo, pero no descarta que el luminoso pueda encenderse en ocasiones puntuales, algo que tratará con el resto de grupos políticos.
Reducir la factura energética
La medida es el primer paso hacia un plan general de ahorro para reducir la factura energética del consistorio en el que el nuevo gobierno socialista se pondrá a trabajar en breve dentro de su política de revisión de los gastos municipales para lograr una Administración local más eficiente.
Además de en lo económico, el apagado es un símbolo de la nueva voluntad ambientalista del gobierno de Cullera, que entiende que es necesario reducir el consumo energético para contribuir a la sostenibilidad del planeta.
«Es del todo incoherente que nos hayamos sumado a eventos como la hora del planeta y que luego hayamos despilfarrado luz todo el año. Hemos de ser más consecuentes y aplicar políticas reales de ahorro y respeto al medio ambiente», ha afirmado el primer edil en referencia a la participación de Cullera en el evento mundial a través del cual durante una hora se apagan las luces para concienciar sobre el cambio climático.
Además, se pretende contribuir a reducir la contaminación lumínica, otro de los problemas ambientales que suele pasar desapercibido y que en Cullera no es una excepción.
Los ahorros que se logren en estas partidas redundarán en beneficio de los ciudadanos ya que la voluntad del nuevo gobierno municipal es destinar el máximo de los recursos económicos posibles al bienestar ciudadano. «En Cullera durante años se ha priorizado a las farolas sobre las personas y eso se ha acabado», ha concluido Mayor.
