Dragut vence a la lluvia y llena las calles de Cullera con 14.000 visitantes
El Desembarco de Dragut y el Mercado pirata han conseguido atraer este fin de semana a 14.000 personas entre vecinos y visitantes, un éxito de público a pesar de las condiciones meteorológicas del fin de semana. De hecho, hasta minutos antes de la recreación histórica el acto se puso en jaque por una fuerte tormenta que descargó sobre la ciudad.
Sin embargo, la lluvia no pudo con el temido pirata y desde el consistorio se muestran «muy satisfechos», en palabras de su alcalde, Jordi Mayor, por el hecho de que el evento, que alcanza el segundo año, se haya convertido en un «atractivo turístico» que permite «proyectar y consolidar a Cullera como una ciudad en la que no solo se puede disfrutar de la playa, sino también de centenares de actividades a lo largo de todo el año».
Esta política de eventos, añade el primer edil, «permite atraer a un flujo de visitantes, que dinamizan al sector turístico y nos colocan como una ciudad de ocio frente a la imagen del pasado de que en Cullera no se hacía nada».
En cuanto a las cifras, la concejalía de Patrimonio Histórico estima en 4.000 los asistentes a la recreación del sábado y contabiliza en más de 10.000 las personas que han pasado por el Mercado pirata.
Realismo
La representación de la leyenda comenzó el sábado a las 19 horas con el desembarco en las aguas del Xúquer del pirata turco Dragut y sus secuaces. Los actores hicieron un recorrido itinerante por el centro histórico y repleto de realismo, sumergiendo al público en la ficción de un saqueo.
Este año incluso un grupo teatral de Cullera ha compuesto una canción dedicada al mítico pirata para que su leyenda también se pueda cantar.
El acto, de unas dos horas de duración, se enmarca dentro del Programa 52 de la concejalía de Turismo, un conjunto de acciones impulsadas por el consistorio que buscan dinamizar y desestacionalizar el turismo de Cullera.La concejalía de Patrimonio Histórico, encabezada por Amparo Jover, fue la encargada de organizar el evento y quiere convertirlo en una tradición local.
La cueva de Dragut
Cullera es el único municipio de la península con un museo dedicado a la piratería. Está situado en la misma cueva en la que Dragut se escondió con sus hombres antes de atacar y cuenta con un recorrido que narra la forma de vida de los piratas en aguas del Mediterráneo del siglo XVI.
Allí se pueden encontrar todo tipo de artefactos piratas de la época e incluso una réplica a tamaño real de la galera que usó Dragut para asaltar Cullera.
