El agua volverá a manar de la fuente de la calle más fotografiada de Cullera
El ayuntamiento y Aigües de Cullera rehabilitan esta infraestructura, que se encontraba en estado de abandono
El agua volverá a correr por la emblemática fuente de la calle del Agua de Cullera. Se trata de la callejuela más fotografiada de este municipio turístico y uno de los espacios más pintorescos de la ciudad, emplazado en el entorno de la concurrida plaza de Andrés Piles.
Por ello, el ayuntamiento, en colaboración con la empresa mixta Aigües de Cullera, ha iniciado los trabajos de recuperación de una infraestructura que en los últimos años se encontraba en estado de abandono y había sido objeto de diversos actos vandálicos.
«No se podía consentir que un icono del municipio siguiera en ese estado», ha explicado el alcalde de Cullera, Jordi Mayor, «por lo que hemos hecho las gestiones necesarias para que, de la mano de Aigües de Cullera y su gerente Laura Gascón, volvamos a poner en valor este espacio».
Reparaciones
La intervención supone, entre otras acciones, la reparación de las grietas detectadas en la zona del trencadís para lograr la impermeabilización. No en vano, las filtraciones de agua fueron la principal causa de la paralizaron del funcionamiento de esta fuente que tiene forma de escalera-cascada.
Además, se aplicarán tratamientos para el mantenimiento de las armaduras o la disgregación de hormigón, ha detallado el edil del Ciclo Integral del Agua, Juan Vicente Armengot.
Por otra parte, la fontana había sufrido pintadas con las que se había dañado parte del mosaico, problema que ahora se subsanará.
La intervención coincide con el 25 aniversario de Aigües de Cullera y tiene un coste de 26.000 euros, financiados por la empresa mixta de la cual el consistorio es el accionista mayoritario. También colaboran en los trabajos los empleados del área de Servicios Exteriores, gestionada por Salva Tortajada.
Tras la finalización de la rehabilitación, la fuente de trencadís volverá a lucir con todo su esplendor y convertirá este enclave, emplazado en el nexo de unión entre la Vila y el barrio de San Antonio, en un nuevo punto de peregrinación turística para fotografiarse, ahora sí, con la fuente en condiciones.
