VOX suprimirá el impuesto de obras en rehabilitaciones y simplificará trámites
El candidato a la alcaldía de Castellón, Luciano Ferrer, se ha reunido con la junta directiva del Colegio de Arquitectos de Castellón, que preside Ángel Pitarch, para contrastar ideas e inquietudes sobre el futuro urbanístico de la ciudad, después del recién aprobado y polémico Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
Luciano Ferrer puso sobre la mesa su intención de dar voz a todos los vecinos y de poner fin, de una vez por todas, al grave problema que sufren hoy en día los vecinos de la Marjalería. Un asunto de vital importancia para VOX y que será una de sus prioridades cuando, a partir del próximo lunes, entre la formación de Santiago Abascal en el Ayuntamiento de Castellón.
Junto a Pitarch estuvieron presentes también los integrantes de la junta directiva: Santa Morro, Ignacio Pascual, Susana Babiloni y Ángel Albert. Asimismo, acompañó a Luciano Ferrer la número 3 en su candidatura, Yolanda Tena Sola-Vera.
Ferrer puso especial énfasis en la necesidad apremiante de simplificar la legislación actual, así como todos los trámites administrativos, que suponen un quebradero de cabeza a los castellonenses cada vez que tienen que comunicar el inicio o la pretensión de realizar una obra. Cabe redundar que en la actualidad se dan casos de una espera de dos años para conseguir una licencia urbanística. Un tiempo que para Ferrer es inaceptable.
VOX quiere suprimir el Impuesto de obras, el denominado ICIO para rehabilitaciones y restauración, y así dar más facilidades al ciudadano y poner en marcha inmediatamente la ventanilla única con el único objetivo y premisa de reducir al máximo los trámites burocráticos.
Pitarch y Ferrer coincidieron en muchos aspectos, entre otros en ofrecer a los vecinos de Castellón una mayor garantía de transparencia y de calidad; un Ayuntamiento más ágil en tareas administrativas que impulse, sobre todo, las obras de rehabilitación del patrimonio y reformas en el centro de la ciudad.
El candidato de VOX a la alcaldía de Castellón analizó con los allí presentes los pormenores de todos los edificios sin uso en la ciudad y se desvelaron propuestas que deberán ser analizadas por Ferrer para propugnar la implantación de las mismas.
Del mismo modo, hicieron un repaso de los principales edificios construidos en los últimos 20 años y Ferrer mostró su predisposición a colaborar en la actualización del anuario del Colegio de Arquitectos; un libro que recoge toda la historia arquitectónica de la ciudad y que podría suponer un atractivo reclamo turístico a nivel mundial.
