El subdelegado del Gobierno denuncia que el Ayuntamiento de Castellón vuelve a torpedear el desdoblamiento de la N-340
El subdelegado del Gobierno en Castellón, Antonio Lorenzo, ha lamentado que “el propósito de lealtad institucional del que habló el pasado lunes el vicealcalde de Castellón, Javier Moliner, haya durado tan sólo 48 horas”. Considera “llamativo” que el equipo de Gobierno del PP del Ayuntamiento de Castellón haya guardado silencio sobre este asunto durante la precampaña y la campaña electoral “sabedor de que la ciudadanía considera indispensable y urgente acometer las obras de desdoblamiento del actual desvío de la N-340” y que una vez terminado el proceso electoral “desde el Ayuntamiento se vuelva a entorpecer un proyecto indispensable para el desarrollo y para la seguridad vial de nuestra provincia”.
Antonio Lorenzo recuerda que “hace unos meses el alcalde de Castellón aseguraba haber hecho los deberes en lo que al trayecto que pasa por Castellón se refiere, mientras exigía al Ayuntamiento de Benicàssim y al Ministerio de Fomento que alcanzaran un acuerdo urgente”. Recordando aquellas declaraciones de Alberto Fabra “la virulenta reacción de Javier Moliner se acerca peligrosamente al ridículo con frases tan desafortunadas como vamos a morir de pie, no vamos a vivir arrodillados”.
El subdelegado del Gobierno quiere expresar a la ciudadanía que “el Gobierno de España tiene el máximo respeto por la voluntad popular, por lo que considera una insidia inadmisible la acusación efectuada por Moliner en el sentido de que el ejecutivo presidido por Rodríguez Zapatero estaría castigando a la ciudad de Castellón”.
Antonio Lorenzo denuncia “el juego sucio de los dirigentes del Partido Popular, que por una parte exigen la realización inmediata de los proyectos, a los que no presentan alegaciones cuando están a tiempo de hacerlo, y por otra torpedean estas obras por todos los medios a su alcance cuando ven que se acerca el momento de iniciar los trabajos”.
El subdelegado añade que “el Gobierno de España ha hecho lo que siempre ha dicho que iba a hacer, que no es otra cosa que impulsar el proyecto aprobado en su día por unanimidad por los ayuntamientos de Castellón y Benicàssim, por el oeste de la autopista y lo más pegado a la misma que se pueda, introduciendo todas las mejoras correctoras necesarias para reducir al máximo el impacto ambiental”. Lorenzo ha recordado que en septiembre de 2007 el actual grupo municipal popular de Benicàssim votó en el pleno del Ayuntamiento respaldando esta opción “que ahora, de manera sorprendente, rechaza el PP de la ciudad de Castellón”.
