Los socialistas de Castellón piden la dimisión del concejal del PP Gonzalo Romero por “cargarse las Tascas”

El portavoz adjunto del grupo municipal socialista de Castellón, Mario Edo, ha exigido al alcalde que “destituya de forma inmediata” al concejal de Sostenibilidad, Gonzalo Romero, por “cargarse las Tascas”. Edo afirma que “el área de Medio Ambiente está en manos de un personaje temerario, que no sólo es incapaz de hacer ni una milésima parte de los proyectos que tiene encomendados, sino que además trata de engañar a los ciudadanos para que no se vea su incompetencia”. “Si no se va de forma voluntaria, Alberto Fabra no debería tardar ni cinco minutos en sacarlo del equipo de gobierno”, añade.

Edo ha presentado pruebas hoy que revelan que Romero mintió el lunes cuando acusó a la asociación Castelló Sense Soroll de haber instigado la declaración de las tascas como Zona Acústicamente Saturada, al afirmar que había sido una sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Castellón la que obligaba a otorgar esta protección legal a la emblemática zona del centro.

El dirigente socialista indica que la propuesta de declaración de las Tascas fue presentada por la empresa de ingeniería acústica Acusttel SL, que el pasado 25 de marzo remitió un informe al alcalde con las mediciones del ruido en la zona, que constataban la emisión de un nivel superior al máximo legal permitido, lo que de obliga al Ayuntamiento a iniciar el expediente para la declaración de ZAS para no incurrir en prevaricación. El informe revela que en los momentos críticos se registraron picos de 86,4 decibelios, por encima del límite legal de 65 decibelios.

“Gonzalo Romero se está cargando las Tascas, porque en tres años de gobierno no ha hecho nada para impedir que se llegase a esta situación”, dice Edo. “El PP no ha aplicado las medidas de control necesarias para facilitar que se cumpliera la Ley Acústica Valenciana. Una ley que, por cierto, aprobó el PP con su mayoría en las Corts Valencianes”, añade. “Romero podía haber propuesto actuaciones para evitar la contaminación acústica con el objetivo de impedir las quejas vecinales contra una actividad tan tradicional”, dice.

“Enfrentar a unos vecinos con otros para tapar sus vergüenzas revela la mezquindad política de la que es capaz el concejal del PP. El alcalde no debería permitir que un miembro de su equipo de gobierno maltrate a la ciudadanía con el desprecio de la mentira. En lugar de fomentar la convivencia entre quienes quieren un ocio responsable como el de las tascas y los que exigen el derecho al descanso, se ha dedicado a echar gasolina al fuego de forma irresponsable”, afirma el portavoz adjunto del PSPV.