Así será la Zona de Bajas Emisiones de Castellón
El Ayuntamiento ha desvelado qué calles estarán afectadas y cómo se podrá circular
Castellón ha deshojado la margarita dando a conocer cómo será la futura Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de la ciudad, qué calles estarán afectadas en su primera fase y cómo se podrá circular por ellas.
La alcaldesa, Begoña Carrasco, ha presentado la revisión del proyecto aprobada este jueves en la Junta de Gobierno, que establece cómo quedarán las dos zonas afectadas, una al norte y otra al sur del casco histórico (que se mantendrá con sus restricciones habituales, aunque se espera que las cámaras dejen de sancionar antes de final de año).
“Cuando llegamos nos encontramos el proyecto adjudicado y con las obras a punto de comenzar”, ha recordado Carrasco, que ha explicado que con la revisión del proyecto se ha buscado cumplir con las directivas europeas para la reducción de las emisiones de carbono al tiempo que se intentan recuperar las máximas plazas de aparcamiento y se permite circular al tráfico sin restricciones, salvo casos puntuales si se disparan los niveles de CO2.
Así, se elimina la obligación de la etiqueta ambiental y se evitan las restricciones duras al tráfico en los 745.000 metros cuadrados enmarcados dentro de la ZBE entre el espacio de las rondas (Magdalena-Mijares-Gobernador-Casalduch), lo que habría afectado a más de 100.000 desplazamientos diarios.
¿A qué calles afectará?
En esta primera fase afectará en la zona norte, en el Raval de Sant Fèlix, a las calles Obispo Caperó, 9 de marzo, Arquitecto Marinestany, Santa Bárbara, Sagrada Familia, Almansa, San Miguel, calle de Tosquella, San Roque, San Félix, San Luis, Conde Pestagua, Arrufat Alonso y plaza Clavé.
En la zona sur las calles afectadas serán la calle San Vicente, San Blas, Bayer, Navarra, San Francisco, Trinidad, Ximénez, Herrero, Moyano, Asensi, Temprado y Lluís Vives.
Puedes consultar en este enlace el mapa completo detallado con las nuevas calles.
¿Qué vehículos podrán circular?
Ninguna calle tendrá restricciones al tráfico, por lo que se podrá circular con cualquier vehículo, ya que los estudios del Ayuntamiento constatan que ningún vial de la ciudad supera el umbral mínimo de contaminación.
Eso sí, se establece un sistema que permitirá el cierre puntual de las calles si en algún punto se supera este umbral de contaminación, como sucede en ciudades como Madrid o Barcelona.
Así, según ha informado el concejal de Urbanismo, Sergio Toledo, en el nivel 1 de contaminación solo se permitirá circular por las calles afectadas durante ese periodo de contaminación a los vehículos con etiqueta ambiental. Es decir, los que tengan menos de 20 años.
Llegado el caso, serán una pantallas las que informarán a los conductores del cierre puntual de esas calles al tráfico sin etiqueta, aunque sí podrán circular los vecinos que vayan a sus hogares y quienes aparquen en un parking.
Aun así, Toledo estima que es una situación “improbable” debido a los bajos niveles de contaminación, que se esperan reducir aún más con medidas como el asfaltado con pavimento fotocatalítico para reducir emisiones.
¿Cuáles son las calles clave de la reforma?
Las principales novedades en el tráfico estarán en cuatro viales.
- La calle Herrero se convertirá en una vía de un solo carril, para ampliar las aceras y el arbolado, pero conservará los dos carriles en las cercanías del Teatro Principal.
- La calle Navarra se mantendrá abierta al tráfico y conservará dos líneas de aparcamiento.
- La calle Asensi se convertirá en un vial de un solo carril para aumentar aceras y arbolado.
- La plaza Clavé mantendrá la circulación en ambos sentidos, pero instalará pavimento fonoabsorbente para reducir el ruido de los vehículos, especialmente de los autobuses.
Además, el Ayuntamiento estudiará modificar también el sentido del tráfico en la calle Temprado, un vial con gran número de tascas.
¿Cómo serán las nuevas calles?
Respecto al proyecto inicial, se aumentan las zonas verdes un 5% y las zonas con sombra estacionales un 195%. Además, se plantarán 44 árboles más de los previstos (344) y un 53% más de jardineras.
Se ganará también un 4% más de espacio peatonal y las calles serán todas de plataforma única y con la misma anchura en las aceras independientemente de la calle, para unificar toda la ciudad.
Por otro lado, en los carriles de circulación se pavimentará con 6.000 metros cuadrados de pavimento fonoabsorbente y otros 19.000 de asfalto fotocatalítico.
¿Dónde se podrá aparcar?
El proyecto inicial planteaba eliminar todas las plazas de aparcamiento en estas calles, un total de 360 plazas, de las que se han recuperado 219, por lo que solo desaparecerán 141, y todas serán de zona verde, es decir, reservada a los vecinos.
La zona que más aparcamiento perderá será la norte, debido a las estrechas calles del Raval de Sant Fèlix, mientras que en el sur se han recuperado gran parte de las que estaba previsto eliminar.
Para los visitantes que lleguen a la ciudad se pondrán en marcha cuatro parkings disuasorios. La ubicación del norte y el sur están aún por definirse, la este se está construyendo junto a la estación de Renfe y la oeste se levantará en el antiguo parking del Goliat.
Estos parkings estarán cerrados con barreras y se podrá aparcar con un precio simbólico que dará derecho a utilizar el transporte público. Por ello, se utilizará el TRAM como lanzadera para acceder a la ciudad en el eje este-oeste y se pondrá en marcha otra línea de bus lanzadera en sentido norte-sur para los conductores que aparquen en las afueras.
¿Cuándo empezarán las obras?
La primera zona en la que comenzarán las obras, de forma inminente, será el Raval de Sant Fèlix, al norte de la ciudad, según se ha informado desde el Ayuntamiento.
Después de la moratoria pedida por el consistorio, las obras de esta ‘fase 1’ deberían de finalizar antes del 31 de diciembre de 2025. Para el futuro queda la evaluación y estudio de la continuación d ella ZBE con una ‘fase 2’ en el resto de zonas de la ciudad.