Representantes políticos apuestan por una mayor intervención ciudadana para detener la regresión del sistema democrático

El Club de Debat de la Universitat Jaume I retomó su actividad en la Llotja del Cànem, Seu de la Ciutat, con la mesa redonda «Regresión democrática: la responsabilidad de los partidos», moderada por el catedrático de Filosofía Moral de la UJI Domingo García Marzá, que contó con la participación de Francesc Colomer, secretario general del PSPV-PSOE de Castelló y portavoz del grupo socialista en la Diputación; Enric Nomdedéu, portavoz de BLOC-Compromís en el Ayuntamiento de Castelló y en la Diputación Provincial; Marina Albiol, miembro de la Comisión Ejecutiva de Esquerra Unida y del Consejo Político Federal de IU y diputada en las Cortes Valencianas; Romain Muzzati, coordinador Territorial de UPyD en la Comunidad Valenciana e Iñaki Vallejo, representante del Partido X. El Partido Popular declinó su participación en este acto.

Domingo García Marzá introdujo el debate destacando la necesidad de hablar de regresión en dos sentidos básicos. Regresión en el funcionamiento democrático, «porque vamos a peor y hay una gran desafección y desconfianza hacia los partidos políticos que pone en peligro el sentido de la democracia». Y regresión en cuanto a la pérdida de derechos, «porque estamos retrocediendo muy rápidamente en derechos sociales básicos como la educación, sanidad, cultura, pensiones, condiciones de trabajo e incluso en derechos civiles y derechos políticos porque cada vez es más difícil reunirse y manifestarse».

Iñaki Vallejo, representante del Partido X, inició las intervenciones explicando la filosofía de este nuevo partido, que ha nacido con el objetivo de ser un instrumento de la red ciudadana para conseguir una modificación estructural del actual sistema de partidos con unos criterios mucho más democráticos y participativos, «porque hay que dejar atrás las estructuras piramidales para hacer más operativa la democracia». Vallejo apostó por una mayor intervención ciudadana en la política y recalcó que su partido defiende soluciones que ya se han puesto en marcha en otros países como una mayor transparencia en la gestión de las administraciones, los wikigobiernos o wikilegislaciones, el derecho a un voto real y permanente o el referéndum obligatorio y vinculante. Por último, concluyó su intervención afirmando que su partido quiere ser «un catalizador de soluciones más que una ideología».

El coordinador de UPyD en la Comunitat Valenciana, Romain Muzzati, comenzó su discurso afirmando que los partidos políticos han ido degenerando y perdiendo el papel que tenían en la sociedad y explicó que el objetivo primordial de su formación es conseguir que los ciudadanos recuperen el protagonismo en la vida pública, accedan al poder y sean gestores de su futuro. «La crisis política y económica ha provocado que los ciudadanos pierdan la confianza en los partidos y para que vuelvan a confiar en nosotros desde UPyD proponemos seis medidas: la aprobación de leyes que luchen de forma real contra la corrupción, una reforma de la Constitución que delimite claramente las competencias del Estado y de las Comunidades Autónomas, potenciar y garantizar la independencia de mecanismos de control independientes y sancionadores, elaborar una ley electoral más justa y proporcional, conseguir una justicia verdaderamente independiente y aprobar una ley de transparencia real».

Por su parte, Marina Albiol, diputada de Esquerra Unida en las Cortes Valencianas, comenzó su intervención afirmando que «estamos ante una defunción de la democracia porque los parlamentos ya no toman decisiones, los gobiernos son simples ejecutores de la política que marca el FMI, el Banco Central, la troika o los poderes económicos». Para la diputada, esta ausencia de democracia se refleja en el hecho de que las políticas no se hacen pensando en la mayoría y puso como ejemplo el rechazo a la dación en pago, las ayudas a los bancos o la privatización de la sanidad. Ante esta situación, Albiol propuso medidas como una modificación de la ley electoral que garantice el voto universal y sea más proporcional, reclamó la necesidad de conseguir más participación política a través de referéndums vinculantes, defendió que hay que cambiar la legislación para que los cargos públicos imputados sean apartados de las instituciones y apostó por una modificación de la Constitución y el Estatuto de Autonomía que garantice de verdad los derechos sociales fundamentales.

Enric Nomdedéu, portavoz de BLOC-Compromís, comenzó su intervención afirmando que «la gente no está alejada de la política en general sino de una forma de hacer política y de unas personas determinadas que hacen política», y refrendó esta afirmación explicando la experiencia del BLOC cuya militancia ha crecido un 21% en los últimos dos años. Nomdedéu, que centró su participación en las medidas que ha tomado su formación para democratizar su funcionamiento, explicó algunas de estas iniciativas como la puesta en marcha de un sistema de encuentros con representantes de la sociedad para elaborar el programa electoral, la realización de reuniones abiertas con los militantes para preparar los plenos municipales, la apuesta por la transparencia, y la celebración de un sistema de primarias totalmente abierto en el que no hará falta ser militante ni para elegir ni para ser elegido.

Por último, Francesc Colomer, constató la deriva democrática que está sufriendo el país y la desafección de la gente hacia la política «porque ya no creen en las instituciones ni en el sistema y lo que es más grave no creen en el futuro». Colomer lamentó que la actual crisis política, económica y social ha provocado que se rompa la cadena del progreso, que hacía que cada generación viviera mejor que la anterior y «ante esto debemos reaccionar ya para recuperar los derechos perdidos». En este sentido recordó que el arquitecto de esos derechos ha sido la izquierda social, encabezada por el PSOE, «porque siempre que hemos gobernado se ha avanzado en temas como la educación, la sanidad, la dependencia y los derechos civiles, aunque también hemos cometido errores». Para finalizar, el representante del PSPV-PSOE concluyó destacando la necesidad de reinventar la política para recuperar su prestigio, «porque no hay sustituto para la política y es lo único que tenemos para cambiar las cosas».