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Presentan un libro sobre Blasco de Alagón

Presentan un libro sobre Blasco de Alagón
  • La Fundación Blasco de Alagón y la Universitat Jaume I colaboran en esta obra de Vicent Garcia

El profesor de Historia del Derecho de la UJI, Vicent García Edo, ha presentado hoy en la Llotja del Cànem el libro Blasco de Alagón, ca. 1190-1299. Al acto, que ha servido para cerrar la exposición sobre el noble aragonés, también han asistido la directora general de Patrimonio de la Generalitat y presidenta de la Fundación Blasco de Alagón, Paz Olmos; así como la Vicerrectora de Cultura de la UJI, Margarita Porcar.

Blasco de Alagón es una completa obra que, según palabras del propio autor “pretende homenajear al personaje” y, al mismo tiempo, “revisarlo, desnudar al mítico guerrero y darlo a conocer como el personaje histórico que es, sin los mitos ni leyendas que le han acompañado”. Para ello se ha realizado un duro y exhaustivo trabajo de investigación y documentación, que comprende desde el Archivo Histórico Nacional hasta el Archivo de la Corona de Aragón pasando por archivos municipales y comarcales como el de Benassal o el del Bajo Ebro.

La Fundación Blasco de Alagón, que debe el nombre al protagonista del libro, y la Universitat Jaume I han trabajado conjuntamente para que este proyecto saliera adelante, en una colaboración que supone “la consolidación de una relación muy fructífera” y que se espera “que sea muy duradera en el tiempo”, según expresaron los representantes de ambas entidades.

Blasco de Alagón fue una figura clave en los inicios de la conquista del Reino de Valencia y, por tanto, como ha señalado Paz Olmos, “protagonista del proceso de identidad del pueblo valenciano”, así como de la repoblación del norte de la provincia de Castellón. El caballero aragonés tuvo una tormentosa relación de amor-odio con Jaume I quien, tras los éxitos militares de su subordinado, “no podía soportar a un personaje con tanto poder”, ha señalado Garcia Edo.

A pesar del gran poder que alcanzó y de sus vastas posesiones, Blasco de Alagón murió en la ruina. En su testamento, realmente una ‘carta de destinamiento’, nombra a su cuñado Pedro Sessé como administrador de sus posesiones, quien una vez gestionadas sus deudas y cobros pendientes, debía repartirlas entre la hija y el nieto huérfano del señor. A su vez, el administrador también se encargó de buscar unos tutores al nieto y de casar a la hija. Don Blasco de Alagón murió en 1239 en la villa aragonesa de María de Huerva, cerca de Zaragoza.

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