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Piden 126 años cárcel para 3 miembros de una banda de explotación sexual

    La Fiscalía de Castellón ha solicitado 126 años de prisión para los tres acusados de pertenencia a organización ilícita, explotación sexual y corrupción de menores, amenazas, detención ilegal y agresión sexual en el juicio oral que se ha iniciado hoy en la Audiencia Provincial.

    Durante la vista, que se prolongará hasta el día 13 de este mes, los tres acusados han declarado no ser responsables de los delitos que se les imputa.

    Inicialmente, el fiscal jefe de Castellón incluía en su escrito de calificación a una tercera acusada, Magdalena Ionescu, para la que pedía 20 años de prisión, aunque posteriormente la causa pasó a la Fiscalía de Menores, pues cuando ocurrieron los hechos la acusada era menor de edad.

    Según el relato del fiscal, el 30 de octubre de 2004, Sorin Constantin Bobieca llegó con la que entonces era su novia, Alexandra Dima, ambos de 15 años de edad y procedentes de Rumanía, a la estación de autobuses de Castellón.

    Allí fueron introducidos a la fuerza en un vehículo, por Ion Jean, su hijo George Virgilu y Laurentiu Nicolae Voicu -declarado en rebeldía-, y bajo constante vigilancia de sus captores permanecieron privados de libertad en contra de su voluntad durante al menos tres semanas en un cuarto trastero.

    En el domicilio sufrieron amenazas de muerte por parte de sus captores y la menor Alexandra Dima, "con el ánimo de enriquecerse a costa de su explotación sexual, fue obligada a iniciarse y ejercer la prostitución" en el club de alterne "Malibú", situado en el municipio castellonense de Villarreal, cada noche.

    El regente del club, Antonio Moreno, y Ion Jean falsificaron la documentación de la joven para que figurase como mayor de edad y, bajo la vigilancia de Magdalena Ionescu, fue obligada a prostituirse desde el día siguiente de su llegada a Castellón, el 1 de diciembre de 2004, y durante 20 días, "manteniendo una media de cinco relaciones con clientes en el club" cada jornada.

    Durante su estancia en el club, Antonio Moreno "con el propósito de satisfacer sus lúbricos deseos" agredió sexualmente en dos ocasiones a la menor, y mientras estaba encerrada en el cuarto trastero, al que era conducida cada día tras trabajar en el club, también fue agredida sexualmente por Ion Jean.

    Al cabo de tres semanas de retención, Ion Jean dejó en libertad a Sorin Constantin bajo la condición de viajar a Rumanía y traer a dos chicas más.

    Al legar a su país, era controlado y amenazado a diario por teléfono por Jean, aunque, a los pocos días de llegar, volvió a España y acudió a la Policía para relatar los hechos.

    El fiscal ha pedido 50 años para el ciudadano rumano Ion Jean por dos delitos de detención ilegal, dos delitos de amenazas condicionales graves, un delito de inducción a la prostitución y corrupción de menores, un delito de agresión sexual, un delito de secuestro y por dirección de asociación ilícita.

    Para George Virgilu, el fiscal ha pedido un total de 26 años por dos delitos de detención ilegal, un delito de amenazas condicionales graves, un delito de inducción a la prostitución y corrupción de menores y un delito de pertenencia activa a asociación ilícita.

    Por último, ha reclamado un total de 50 años para Antonio Moreno por dos delitos de detención ilegal, un delito de inducción a la prostitución y corrupción de menores, dos delitos de agresión sexual y un delito de pertenencia activa a asociación ilícita.

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