Por tercer año se organiza una jornada para tratar el fraude al seguro

El Colegio de Mediadores de Seguros de Castellon organizo por tercer año consecutivo, junto con La Policía Nacional, una nueva jornada para tratar el fraude al seguro, siendo convocados todos los intervinientes en el sector asegurador.

La reunión fue presidida por el Comisario Principal, Jefe Provincial Jorge Martí y por el Presidente del Colegio de Mediadores de Seguros de Castellón, Antonio Fabregat Fabregat.

La convocatoria contó con un gran éxito de asistencia, con más de 40 profesionales del sector, en sus diferentes vertientes: mediadores, agentes y corredores, empleados de compañías y varios alumnos del Curso Superior de seguros destacando la representación de compañías como: Zurich, Allianz, Reale Seguros, Generali, Mutua Levante, Plus Ultra, entre otras.

La reunión se enfocó en varios aspectos relacionados con este problema, destacando que en lo que va de año se han casi triplicado las simulaciones de delitos con respecto a todo el ejercicio de 2013, y se han doblado los detenidos por ello.

Las simulaciones de delito, conocidas comúnmente como denuncias falsas, no son nuevas, pero aumentan de forma exponencial, ocasionando perjuicios para todos los ciudadanos, además de a las aseguradoras, ya que en un primer momento la policía se alerta ante este tipo de hechos (un robo con violencia) y pone sus recursos a trabajar para atrapar a esa persona imaginaria que ha llevado a cabo un robo con violencia y otro prejuicio de gran importancia es que aumenta la inseguridad subjetiva, ya que se denuncian delitos que no se están cometiendo y los ciudadanos piensan que en su ciudad se cometen muchos más delitos que la cifra real, lo que genera que se sientan inseguros.

Muchas de estas simulaciones se dan cuando una persona, por ejemplo pierde el teléfono móvil, equipos que actualmente tienen un alto coste económico y para poder cobrar indemnización del seguro se presenta en dependencias policiales y finge haber sido objeto de un robo con violencia para estar cubiertos por dicho seguro.

En la reunión se informa a los presentes, para que transmitan a sus clientes que con esta acción no sólo se está cometiendo una simulación de delito que puede acarrear una cuantiosa multa económica, sino que además cometen una estafa, pudiendo esta última conllevar a un ingreso en prisión, sin contar el hecho de que ambas conllevan la detención, es decir: declaración con abogado, ingreso en calabozos, posterior juicio y antecedentes policiales…

En la reunión se quiere que se haga extensiva la concienciación en los usuarios de que esto es un delito y no una "chiquillada", y que tiene consecuencias gravosas para la persona, ya que muchos de los detenidos, tras ser descubiertos dicen que no se imaginaban que esto podía pasar, de haberlo sabido no lo habrían hecho.

Algunos de los convocados señalan que el aumento de las simulaciones se debe a la crisis, que asesoran a sus clientes de que esto no se puede hacer y que se trata de un delito, aprovechando la reunión para darles más convicciones de peso que puedan transmitir a los asegurados para que desistan de estos fraudes.

El perfil del autor de simulaciones es muy diverso y responde a gente “normal”, padres y madres de familia a los que sus hijos han perdido el móvil y simulan que se lo han robado, señoras que han perdido el bolso y dicen que se lo han hurtado.

Con esta reunión se afianza el canal de comunicación Seguros-Policía, para intentar atajar las simulaciones que se producen, pero lo más importante es evitar que se produzcan, persiguiendo un fin preventivo bajo el lema “No merece la pena”.