Enguídanos aboga por más acciones contra la exclusión social en los barrios degradados

La concejala socialista de Bienestar Social, Inmaculada Enguídanos, defiende la aprobación de medidas para paliar la exclusión social en las zonas más degradadas de Castellón. “Estamos viviendo situaciones dramáticas y se detectan carencias sociales y económicas en toda la ciudad, pero es innegable que hay barrios más vulnerables que no solo necesitan ayudas asistenciales o de emergencia, sino intervenciones más ambiciosas”, apunta.

Enguídanos respalda la propuesta debatida en el pleno de un plan integral para el barrio de San Lorenzo, aunque advierte la necesidad de ampliar el alcance de las acciones contra la exclusión social a otras zonas con un nivel de degradación similar. A su modo de ver, la crisis económica ha contribuido a incrementar la situación de marginalidad de los barrios más pobres de Castellón.

“La exclusión social no se ha eliminado, al contrario, ha ido en aumento; el porcentaje de personas desempleadas ha crecido de forma considerable; el índice de absentismo escolar sigue siendo elevado, y el hacinamiento familiar en las viviendas desencadena problemas de convivencia”, añade. “Hay que dar nuevas respuestas a los viejos problemas y desarrollar acciones de empleo y bienestar social para los barrios periféricos”.

En ese sentido, recuerda que el proyecto Urban, impulsado en 1998, no ha conseguido avances en el bienestar de la zona oeste. Los objetivos del proyecto eran mejorar las comunicaciones y dotaciones urbanísticas, impulsar el tejido económico y generar empleo, integrar el barrio en la ciudad, atenuar las carencias sociales, educativas y sanitarias, así como eliminar la situación de exclusión social.

Doce años después de la puesta en marcha del Urban, la realidad social en San Lorenzo sigue en el umbral de la exclusión social. “Los problemas sociales, educativos, sociales, económicos y de aislamiento de entonces aún no han conseguido solventarse”, apunta Enguídanos, quien resalta que “la transformación urbanística de la última década en el conjunto de la ciudad no ha conseguido la integración de los grupos periféricos, que sigue siendo una de las grandes aspiraciones de los residentes en estos barrios”.