Marco arremete contra unos presupuestos de la Generalitat que recortan un 73% las aportaciones a los proyectos de Castellón
La portavoz socialista dice que “el alcalde cumpliría mejor su papel si, en lugar de lamentarse y resignarse, hiciera algo para enmendar el maltrato político de Valencia”
“El Partido Popular le da la espalda a la ciudad de Castellón”. La portavoz socialista de Castellón, Amparo Marco, hace una crítica contundente de los presupuestos de la Generalitat, que recortan todas las partidas de gasto previstas para la capital. “Alberto Fabra demuestra que no tiene ninguna sensibilidad hacia la ciudad en la que fue alcalde. El presupuesto de 2013 es el peor para Castellón en toda la democracia”.
La caída de las transferencias de capital, es decir, las cantidades destinadas para inversiones y obras concretas, ha sido del 73%, al pasar de 12 a 3 millones de euros. Los proyectos de obras hidráulicas en la Marjaleria tendrán un 40% menos de presupuesto, la reforma de la Fábrica Dávalos disminuye en un 98% y solo se consignan 200.000 euros para remodelar el Gaetà Huguet, una de las obras emblemáticas para el equipo de gobierno.
Marco señala que la Generalitat mantiene una partida de 2 millones de euros para un convenio con la Cámara de Comercio de Castellón, mientras descienden de forma alarmante todas las inversiones reales. Un caso concreto es el de la antigua Audiencia Provincial, para cuya reforma se consignaron en su día 10 millones de euros y ahora, en cambio, solo se prevé destinar 2 millones de euros.
También caen las aportaciones de la Conselleria de Educación, Formación y Empleo en un 76% y las de Bienestar Social en un 84%, lo que amenaza la continuidad de algunos servicios esenciales, como el centro de acogida. “El Estado del bienestar se desmorona. El PP recoge ahora los frutos de unos gobiernos autonómicos despilfarradores como los de Camps, que han causado un perjuicio gravísimo a la Comunitat”.
“Los presupuestos de Fabra nos hunden más en el pozo de la crisis. Son unos presupuestos que no generan empleo ni desarrollo industrial y que, en definitiva, no generan futuro en la ciudad de Castellón”, afirma Marco, quien lamenta la “actitud cómplice” del alcalde Castellón. “Bataller cumpliría mejor su papel si en lugar de lamentarse y resignarse por estos pésimos presupuestos, hiciera valer su peso político para enmendar este maltrato institucional hacia Castellón”.
