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El Ayuntamiento solicitará un préstamo de 7 millones de € para pagar facturas de contratos adjudicados sin concurso público

    El pleno del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado un plan contra la crisis económica que incluye medidas para incrementar el rigor presupuestario y el control del gasto público en la misma sesión en la que se ha admitido solicitar un préstamo de 7 millones de euros con el que pagar facturas de contratos adjudicados sin concurso público.

    La propuesta para la solicitud del crédito ha sido apoyada por el grupo municipal popular y rechazada por los grupos del PSPV y del Bloc, cuyos portavoces han acusado al concejal de Hacienda, Juan José Pérez Macián, de incumplir los requisitos de contratación de empresas y de gestionar de forma deficiente la economía municipal.

    El préstamo, de 7 millones de euros, permitirá pagar facturas de ejercicios anteriores a diferentes empresas que a las que el Ayuntamiento concedió servicios como la limpieza de colegios, la instalación de calefacción o la realización de obras, y cuya cuantía no estaba contemplada en los presupuestos municipales.

    En su intervención, Pérez Macián ha admitido que el préstamo servirá para corregir "pequeñas deficiencias" y dicho que no hay "observancia completa de legalidad" en las facturas, lo que para el portavoz del Bloc, Enric Nomdedéu, supone reconocer que se ha hecho una "mala gestión administrativa".

    Por su parte, el concejal socialista Javier Peris ha asegurado que el Ayuntamiento ha contraído la deuda con empresas contratadas "a dedo" -una de las cuales recibirá el 25 por ciento de los pagos, según los socialistas- y ha lamentado que el equipo de gobierno actúe de modo "habitual" con "falta de transparencia".

    También ha criticado que se pretenda solicitar ese préstamo antes que el de 5 millones de euros contemplado en el Plan Económico y Financiero con el que se debían impulsar las inversiones recogidas en los presupuestos de 2008, que ascendían a 168 millones de euros.

    Tanto el PSPV como el Bloc han acusado al equipo de gobierno de someter a la ciudad de Castellón a un "endeudamiento continuo", cuya tasa se sitúa en el 75 por ciento de los presupuestos de 2008, según ha reconocido Pérez Macián.

    El concejal de Hacienda ha incidido en que esa cifra, que es "legal", se ha alcanzado porque el Ayuntamiento destina el 30 por ciento de su presupuesto a cubrir competencias que no le son propias y por la "situación económica difícil" a la que ha abocado la crisis a los municipios.

    Precisamente para hacer frente a la situación económica, el grupo popular ha presentado en el pleno un decálogo de medidas que incluye la congelación del salario de los concejales, la contención del gasto público y la limitación de las contrataciones públicas.

    La moción recoge además que en 2009 las tasas y los impuestos municipales sólo subirán en relación con el Índice de Precios al Consumo (IPC), y que a partir de ese año, los castellonenses podrán fraccionar los pagos de impuestos a la administración local.

    El Ayuntamiento tratará de reducir el consumo en aspectos como el papel o la telefonía e impulsará una auditoría para que descienda el consumo energético de la ciudad y del consistorio, al tiempo que incrementará las inspecciones de los servicios municipales para conseguir una mayor eficiencia en el gasto.

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