El General de Castelló ha atendido desde 2008 más de 1.100 pacientes de ictus, el 60% por infarto cerebral

El Hospital General de Castelló ha acogido hoy la “Jornada Código Ictus para la provincia de Castellón”, en la que expertos en la materia han analizado la atención urgente que se realiza a los afectados por esta patología en el ámbito provincial.

La jornada, inaugurada por la gerente del Departament de Salut de Castelló, Elvira Bosch, y que ha sido clausurada por el Director General de Ordenación y Asistencia Sanitaria de la conselleria de Sanitat, Guillermo Ferrán, acompañado por el director médico del Hospital General de Castelló, Francisco Pérez y el jefe de la Sección de Neurología, Daniel Geffner.

El Código Ictus en la provincia de Castellón ha servido para que, desde noviembre de 2008, pudieran valorarse como emergencias médicas 1.117 pacientes: entre 300 y 360 pacientes al año. De ellos, más del 80% requirieron ingreso hospitalario.

Tal y como ha destacado Guillermo Ferrán, “una de las claves del éxito es la rapidez con la que se detectan los síntomas iniciales y se contacta con los sistemas de emergencias médicas. La máxima es Tiempo es cerebro”.

El infarto cerebral fue la principal causa de activación, con alrededor del 60% de los Códigos Ictus activados, mientras que recibieron trombolisis endovenosa 193 enfermos, del 25 al 33% de los pacientes que fueron atendidos por ésta.

La jornada celebrada hoy ha contado con la participación de todos los actores sanitarios que participan en la asistencia al Ictus. Así, acudieron profesionales de Atención Primaria y miembros de los servicios de emergencias médicas.

“Este plan, vigente hasta el año 2015, contempla una red asistencial intra e interdepartamental organizada alrededor de equipos de ictus e integradora de todos los niveles asistenciales para activación del Código Ictus, es decir, el protocolo que permite la rápida identificación, notificación y traslado inmediato del paciente con ictus al centro más adecuado para su tratamiento”, ha destacado Guillermo Ferrán.

Por ello, ha servido para reforzar los logros del circuito asistencial y discutir los problemas detectados para poder mejorar la actuación de la sanidad pública en este grupo de enfermedades.

La participación de los profesionales de atención primaria es básica en la provincia de Castellón, por ser la puerta de entrada al sistema sanitario en algo más del 50 % de los ictus. Es por ello, que se les ha distribuido 800 tarjetones de Códigos Ictus en su versión vigente (desde diciembre de 2011) con los nuevos criterios de activación de éste código.

La actuación de los servicios de emergencia sanitaria, Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) ha permitido, según el jefe de Sección de Neurología, Daniel Geffner, recortar las demoras en la valoración del enfermo y agiliza la realización de las pruebas así como la rapidez en recibir el tratamiento adecuado.

Así, la coordinación entre los servicios de urgencias hospitalarias y los especialistas se ha demostrado posible, pudiendo conseguir cumplir en la mayoría de los casos, con los tiempos recomendados en las guías clínicas elaboradas por las sociedades científicas. Por ello, se ha desarrollado un apartado específico para ello en el programa.

El Código Ictus
Desde noviembre de 2008 está operativo en Castellón el sistema Código Ictus. Éste consiste en una actuación sanitaria coordinada entre los distintos eslabones asistenciales: medicina primaria (centros de salud y puntos de atención continuada), servicios de emergencia sanitaria (CICU-SAMU), urgencias hospitalarias (Hospital de Vinaròs, Hospital de La Plana y Hospital General de Castelló) y los especialistas hospitalarios, y que está dirigida a reconocer, comunicar y trasladar de forma urgente a los pacientes de esta patología a la Unidad de referencia ubicada en el General de Castelló.

Para la activación del Código Ictus se deben cumplir ciertas condiciones: tiempo de evolución desde el inicio de los síntomas menor a 4 horas; ser autónomo en poder realizar las actividades básicas de la vida (vestirse, asearse y caminar) y tener síntomas compatibles con el Ictus. La rápida actuación del sistema sanitario es básica para dar el tratamiento apropiado al paciente.