Iniciativa pide que el ayuntamiento se distancie sobre la propuesta de ceder suelo municipal a empresas privadas para hacer centros escolares

El portavoz de Iniciativa en Castelló, Jose Pedregosa, ha pedido hoy que el nuevo alcalde de Castelló por la gracia de los Fabra, Alfonso Bataller, empiece a mostrar un cierto grado de madurez política y sepa marcar prioridades y defender en primer término los intereses de la ciudad frente a los desvaríos de su partido, y defienda el sistema público de la enseñanza, como mejor manera de garantizar el ejercicio del derecho a la educación que, desde la Educación Infantil hasta la Universidad, esté al servicio de las necesidades sociales, de la igualdad de oportunidades y de los valores democráticos.

Todo esto, viene a colación al hecho que el nuevo conseller de Educación, José Císcar, anunció la intención de la Consellería de poner suelo público municipal a disposición de empresas privadas para la construcción y explotación de centros escolares “esto sólo será posible si encuentra a alcaldes tanto indignos como la propuesta lanzada, y esperamos Bataller de la talla”.

Para Pedregosa, Bataller tendría que exigir a Císcar la construcción de todos los centros pendientes a la ciudad, y en especial dotar de una red pública de las escuelas infantiles de 0 a 3 años “sabemos que su predecesor en la alcaldía empleó el dinero de los Planes E para hacer guarderías pagadas con dinero público para privatizar su gestión, y esa es la dirección en la cual no tiene que ir”

El portavoz ecosocialista ve una barbaridad que se apueste por un sistema de centros concertados -es decir privados subvencionados con fondos públicos- y disfrutando de una concesión de 75 años durante los cuales serían explotados por las empresas privadas, con el pago de un canon por la cesión de los terrenos públicos.

Esta propuesta supone renunciar en la escuela pública de calidad como la única que puede garantizar la igualdad de oportunidades entras los ciudadanos y ciudadanas y sustituirla por una escuela privada/concertada, donde la escuela pública sería meramente subsidiaria de esta. Supone igualmente una rotura del consenso sobre la planificación del mapa escolar y la ejecución del mismo.