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Guillamón: “El Ayuntamiento condena a los vecinos de la Marjaleria a ser ciudadanos de segunda”

    El concejal popular, Vicente Guillamón, insta al bipartito a escuchar a la Asociación de Vecinos de la Marjalería en sus reivindicaciones y a que exija a la Conselleria de Sanidad a que continúe abierto el consultorio de este punto de la ciudad, que un año más deja de prestar servicio a los castellonenses.

    "El Ayuntamiento de Castellón condena a los vecinos de la Marjaleria a ser ciudadanos de segunda. No puede ser que falten servicios básicos como el de la atención sanitaria, dejándoles en una situación que es absolutamente tercermundista", lamenta Guillamón.

    "Desde el Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón lo venimos reclamando toda la legislatura, y de manera periódica, porque es un problema endémico que PSPV y Compromís no atienden. Así se lo hemos reivindicado y así lo volvemos a demandar, atendiendo la petición que nos han trasladado siempre el presidente de la Asociación de Vecinos de la Marjaleria, Rogelio Molina, en cuantas reuniones hemos tenido".

    "De esta manera descongestionaría el Centro de Salud del Grao, al que tienen que acudir los vecinos de la Marjaleria durante el invierno. De esta manera, dicen, se evitarían largas horas de espera antes de ser atendidos por el médico", añade.

    "Hay que tener en cuenta que en invierno vive mucha gente mayor en la Marjaleria y garantizarles el servicio del médico, a pocos metros de sus casas, supondría un gran avance en la calidad asistencial de los vecinos. Amparo Marco, que conoce bien la zona, no debe ponerse de perfil ante los temas sanitarios, que tanto preocupan a la ciudadanía, y debería mediar con la consellera de Sanidad, Ana Barceló, para tomar en consideración esta propuesta, que a su vez ya hicimos en su día a su antecesora, Carmen Montón.

    "El PSPV y Compromís solo hacen que recortar servicios, empezando por la Sanidad. Tres años de Gobierno han servido para que los castellonenses tengan hoy peores servicios que cuando llegaron. Ni hay más médicos, ni se han ampliado horarios ni se han construido nuevos centros de salud o consultorios, más bien todo lo contrario, se han suprimido servicios como el de la ambulancia para atender las urgencias domiciliarias o se han incrementado aún más las listas de esperas", añade Vicente Guillamón, quien recuerda otros problemas como el colapso en las urgencias del Hospital General, "que ya es una enfermedad crónica, las listas de espera en Oncología del Hospital Provincial o el mal estado del consultorio de la plaza Constitución, por citar algunos ejemplos.

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