El Castellón dio un paso adelante en su proyecto de consolidación
El club que preside José Laparra ha conseguido la quinta posición al final de la Liga, un puesto que se ha valorado muy positivamente después de que el equipo coqueteara con el descenso en las jornadas iniciales de la temporada.
Posteriormente, tras el cambio de entrenador, con la llegada de Pepe Murcia en sustitución de Pepe Moré, el equipo mantuvo remotas aspiraciones de ascenso, pero nunca llegó a convertirse verdaderamente en un peligro para los que equipos que iban por delante en la tabla clasificatoria.
Haber hecho del estadio Castalia un fortín, con tan sólo dos derrotas en toda la Liga, y observar las condiciones defensivas del equipo que ha recibido muy pocos goles, han sido otros de los de los aspectos valorados positivamente por el consejo de administración de al entidad.
Ya durante la junta general de accionistas del club, realizada en el mes de diciembre, se fijaron algunos de los objetivos de la campaña que concluye en la que el club ha funcionado con un presupuesto ligeramente inferior a los siete millones de euros.
En ese momento, Laparra ya hizo públicas las intenciones de que el objetivo deportivo era consolidar al equipo en Segunda División A y "una vez conseguido, tratar de ser lo más competitivos posible en todas las competiciones en las que participe el club".
En este contexto, el Castellón está dispuesto a afrontar la próxima temporada con un proyecto deportivo nuevo y con el bagaje de la que ahora acaba y en la que el estado de ánimo del entorno del club ha sido ascendente.
El proyecto actual dio comienzo hace tres años con la promoción de ascenso superada ante el Zamora, lo que ha permitido alcanzar la quinta posición en la tabla, circunstancia que no se producía desde la lejana campaña 84-85, puesto que en las dos últimas temporadas el equipo ha sido duodécimo y decimocuarto, respectivamente.
Este quinto puesto se ha convertido en el tercer mejor registro del equipo en los últimos treinta años, ya que esta marca sólo ha sido superada por los campeonatos obtenidos en la categoría en dos ocasiones y que conllevaron el correspondiente ascenso.
Esos ascenso a Primera se registraron al concluir la campaña 80-81 y propiciaron un sólo año en la elite del fútbol espñaol, y en la 88-89, tras el que el equipo estuvo dos años en Primera.
