Carrasco: “Marco no puede seguir ausente ante las deficiencias que ha dejado su proyecto urbanístico estrella en Maestría”

La portavoz popular, Begoña Carrasco, el concejal, Carlos Feliu, y Raúl Chaparra, miembro de la Junta Local del PP se han desplazado hasta Maestría para comprobar junto a la asociación de vecinos las deficiencias y los problemas que ha dejado en el barrio su reciente remodelación. No se ajusta al proyecto de mejora que la alcaldesa prometió a los residentes.

Carrasco: “La remodelación del barrio no contenta a los vecinos. Es vergonzoso que una remodelación que ha tenido sobrecostes, que se han pagado con el dinero de los Presupuestos Participativos, al final se ha traducido en menos servicios y menos seguridad para el barrio. Y lo más llamativo de todo es que la alcaldesa permanezca callada todo este tiempo, ante los problemas que ha dejado su proyecto urbanístico estrella”.

“La reforma integral -que ha costado 1,6 millones de euros- nada tiene que ver con el proyecto que se prometió a los vecinos. Por eso, instamos a la alcaldesa a corregir las deficiencias que denuncian los propios vecinos, antes de dar por finalizada la obra”.

El principal miedo de los residentes es la reducción de alcantarillas, menos de las que se habían proyectado. Lo poco que llovió la semana pasada fue suficiente para que los vecinos comprobaran que el agua quedaba acumulada en las aceras. Además, hay sumideros que no están a ras de la calzada, otros invaden los rebajes de aceras en los pasos de cebra, lo que supone un peligro para los viandantes que utilizan bastón.

Las calles estrechas y la ausencia de bordillos o elementos de protección en las aceras provoca que los vehículos invadan las aceras poniendo en peligro a los peatones. “Pese a que estaba en el proyecto, tampoco se han eliminado postes de en medio de las aceras, ni se ha buscado solución al cableado aéreo, que sigue estando igual que estaba. Falta iluminación en el barrio, no se han renovado los brazos de algunas farolas y tampoco han sido colocadas según el proyecto inicial, que planteaba distribuirlas a ambos lados de la calle, dejándolas en penumbra”.

Además los vecinos solicitan un replanteamiento de la ubicación de contenedores, su colocación elimina metros de aparcamiento- que en el barrio ya es muy escaso- y hay viviendas donde se les ha colocado frente a la puerta, cuando era posible desplazarlos unos metros.