Caricaturas, perros haciendo campaña, o candidatos con espadas láser: las anécdotas más curiosas de las elecciones municipales
Los aspirantes a las alcaldías de la Comunitat Valenciana han protagonizado llamativos momentos durante las últimas dos semanas
La campaña de las elecciones municipales llega mañana a su fin en toda España. Después de dos semanas, los candidatos a los Ayuntamientos de la Comunitat Valenciana han sido los protagonistas de numerosos mítines y debates, pero también de algunas anécdotas curiosas que han quedado inmortalizadas y sin duda serán recordadas.
Es el caso del alcalde de Valencia y candidato a la reelección, Joan Ribó. El actual alcalde escenificó en redes sociales uno de los momentos más tiernos de la campaña, cuando acudió a la clausura de la Feria del Libro para comprar una novela a sus nietas. “Rodearte de libros y de la naturaleza en los Viveros es siempre un buen plan para hacer con los tuyos”, escribió, dejando entrever que su faceta de abuelo está tan presente en su vida como la de candidato a la Alcaldía.
El propio Ribó, además, ha recibido unos curiosos dibujos pintados por artistas en los que aparece él mismo caricaturizado por ejemplo, luchando contra un dragón o volando en bicicleta por la luna de Valencia. El alcalde se ha mostrado encantado con estas dedicatorias y así lo ha hecho saber en sus redes sociales: “Nuestra ciudad está llena de artistas y talento. Gracias”, escribió.
Pero Ribó no ha sido el único que ha protagonizado divertidos momentos durante esta campaña. Y es que la candidata a la Alcaldía de Valencia por el PSPV, Sandra Gómez, animó a su perro a participar en la campaña con una camiseta donde se leía “Sandra Alcaldesa”. Una original iniciativa que publicó en su cuenta de Instagram: “Mi Pep lo tiene claro. ¡Por experiencia sabe quién va a ser la alcaldesa que más cuide a los peludos!”.
Además, la candidata también se declaró amante de la lectura durante la Feria del Libro. En su caso optó por subir a una estatua de Harry Potter junto al elfo Dobby y recordar una frase de este: “Para Dobby el regalo de un calcetín dentro de un libro significó su libertad. Bonita metáfora de lo que simboliza un libro”.
Por su parte, la candidata del PP a la Alcaldía de Valencia, María José Català, también fue objeto de comentarios, en esta ocasión durante el pleno de comienzo de la legislatura. Català protagonizó una de las anécdotas del día en Les Corts al acudir vestida de rojo, un color que la fallecida Rita Barberá denominaba “rojo alcaldesa”. En política la vestimenta casi nunca es casual, por lo que para muchos este acto de la candidata simboliza toda una declaración de intenciones.
Pero para Català “no todo es política”, y así lo ha mostrado en varias ocasiones acudiendo a los partidos de fútbol del Valencia CF. Futbolera y valencianista declarada, llegó incluso a participar en el programa Sillas Gol para analizar el partido entre el Arsenal y el Valencia CF.
El candidato de Ciudadanos al Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, también ha inmortalizado momentos divertidos durante la campaña, como su visita a la Feria de la Primavera de los Viveros, donde fingió, espada láser en mano, ser uno de los míticos personajes de Star Wars. “Con la FUERZA en la Feria de la Primavera”, escribió en una fotografía donde aparecía junto a amigos y familiares disfrazados de los personajes.
Pero no todo han sido buenos recuerdos durante la campaña. La casa de la candidata del PP de Castellón, Begoña Carrasco, fue atacada por unos independentistas que pintaron lazos amarillos e insultos en la fachada. “Puta” o “facha” son algunos de los insultos que escribieron en la puerta de su casa mientras ella se encontraba dentro con su familia, incluida su hija menor de edad. No es la primera vez que le ocurre a la candidata, ya que según denunció Carrasco, ha sufrido estos ataques hasta en cuatro ocasiones, aunque siempre se habían limitado a las vallas publicitarias.
También ha sido atacado el partido Ciutadans Independents per Borriana (CIBUR), al que cortaron las bridas que sujetaban la pancarta electoral. El partido lo ha calificado como un “sabotaje” y ha asegurado que para ellos “no todo vale en política” y actos como estos “descalifican a quienes los realizan”. “Esta pancarta es, además de un reclamo electoral de primer orden, una forma de hacer política”, han subrayado desde CIBUR.
