ACODIS y AZIBA reclaman una estación de trenes segura y accesible para Burriana y les Alqueries o que los responsables "¡¡¡dimitan!!!"

Alrededor de unas cuarenta personas se han dado cita esta mañana en la estación de trenes Burriana-Alqueries para protestar por la falta de accesibilidad y el peligro que representa la obligación de tener que cruzar las vías para ocupar el andén en el que se toman los trenes con dirección a Valencia. La protesta, organizada por la Asociación Colectivo de Discapacitados ACODIS y la recientemente creada asociación de vecinos A.Z.I.B.A. –Afectados Zonas Inundables de Burriana y Alqueries– ha sido secundada por todas las fuerzas políticas con representación en ambos consistorios, sin excepción, encabezadas por el alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, y el primer teniente de alcalde de Alqueries, Javier Muñoz.

Las asociaciones convocantes han leído un manifiesto, guarecidos en la marquesina de la estación, pues arreciaba la lluvia, en la que textualmente han expuesto, tras agradecer la presencia de autoridades y medios informativos: “las preguntas que nos hacemos y trasladamos al Ministerio de Fomento y a la Generalitat Valenciana son: ¿quién esta interesado en que la estación de ferrocarril de Burriana-Alqueries siga siendo la más abandonada y tercermundista de toda la Comunidad Valenciana? ¿Acaso los ciudadanos de Burriana y Alqueries son de una casta inferior? ¿Acaso los ciudadanos que utilizan esta estación no tienen los mismos derechos que el resto?”

“Se han hecho obras de adecuación y modernización en muchísimas estaciones. Se contempla en el plan de cercanías la modernización y adecuación de otras, y la construcción de nuevas.

¿Que pasa con esta estación? Y lo preguntamos ahora, y lo seguiremos preguntando hasta que nos hagan caso”, han añadido.

“¿Hace falta presupuesto o financiación?, cuestionaban en el escrito. Nosotros les diremos de donde sacar la financiación; saquen el dinero del esperpéntico derroche del Senado con los "pinganillos" porque eso señores es una burla al sentido común; saquen el dinero de las millonarias pensiones vitalicias que los políticos con la más grande desvergüenza se autoconceden; saquen el dinero del derroche de las embajadas autonómicas, y de lo que cobran sus altos cargos y asesores; y saquen ustedes el dinero de las subvenciones absurdas que se conceden sin ton ni son y que no se sabe para que sirven”.

“¿Existen problemas técnicos?, volvían a cuestionarse. Cuando se han solucionado los problemas técnicos del AVE en el embalse de Contreras, solucionar los problemas de esta estación es cosa de niños”.

Por ultimo han solicitado a los representantes municipales que no cedan en sus reivindicaciones. “Día tras día, ACODIS y AZIBA, y pueden estar seguros que todas las asociaciones, colectivos y empresas de Burriana y Alqueries estarán a su lado. Hay que transmitir a todos los ciudadanos que hay que decir basta a las burlas de la administración. La dignidad que como personas y como ciudadanos tenemos, no puede tolerar este desprecio”.

Para concluir han expresado que “al final o se soluciona este problema que tenemos, o tendremos que decir al Ministerio de Fomento y al Presidente de la Generalitat: señores carecen ustedes de capacidad para ostentar el cargo que ocupan: ¡¡¡dimitan!!!”.

El alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, ha declarado que se trata de una reivindicación justa. “Desde el Ayuntamiento de Burriana ya llevamos un tiempo solicitando mejoras, especialmente desde que falleció en un accidente don Juan Canós, y hasta ahora no hemos recibido ninguna respuesta positiva por parte de ADIF y el Ministerio de Fomento, que son los responsables de la instalación ferroviaria en todos los municipios de España”. Para Calpe es muy positivo que entidades cívicas se sumen a esta iniciativa que desde hace unos años está llevando a cabo el Ayuntamiento de Burriana, y que la hagan propia, como muestra de la vitalidad social del municipio. “Espero que sea escuchada la reivindicación porque no exige una inversión desmesurada. Yo podría entender que la Generalitat o el Estado, como es este caso, en la época actual, tengan que ralentizar ciertas inversiones porque es necesario gastar menos; pero esta es una inversión que no requiere un gran esfuerzo económico, y en cambio aportaría mucho a la seguridad de las personas, e incluso, probablemente, se incrementaría el número de usuarios si se dispusiera de una estación más confortable y con más garantías, favoreciendo el transporte público, la sostenibilidad, la movilidad, y en definitiva, una nueva concepción de lo que deben ser los transportes”.