Se desvelan los trajes oficiales de las Reinas Falleras 2011

Tras la proclamación oficial como Reinas Falleras de Burriana 2011 iniciaba ya una carrera de actos y citas que van a copar la agenda de las dos jóvenes más afortunadas de la ciudad en estos momentos, la Reina Fallera, Isabel Lozano, y la Reina Fallera Infantil, Carlota Luna; seguido de actos que se inauguraban con la visita de la corporación a la exposición de los trajes oficiales de las Reinas.

La ubicación de la casa de la Reina Fallera Infantil, en la Serratella, ha impedido que se realizara el habitual desfile a pie hasta su domicilio por lo que tras las protocolarias fotos que siguen a la proclamación, toda la comitiva se desplazaba en coche hasta su casa. Una vez allí, la expectación era máxima pues estaba a punto de desvelarse uno de los secretos mejor guardados de esta ciudad: los detalles del traje que lucirán las Reinas Falleras de Burriana durante todo el año josefino. Al abrirse por fin la puerta de la casa, se desvelaba una exposición cuidada al detalle en la que, como resulta preceptivo los trajes ocupaban el lugar principal. A la derecha lucía el segundo traje esponsorizado que fue presentado esta semana en el salón de plenos junto al corte de tela para el tercer traje oficial. A la derecha se presentaba imponente el espolín Reina de Burriana tejido en azul iris con una combinación de colores que hacían del conjunto un verdadero traje de princesa.

Según la indumentarista, Isabel Romero, y la misma niña nos confesaban, estuvo dudosa Carlota en su elección entre el azul iris y un rosa claro, pero debido a que el segundo traje oficial ya tiene ya tonalidad rosada se decantó finalmente por el azul. Para sorpresa de la Corte de Carlota, en la parte superior de la exposición luce un bonito retrato de todas las niñas; al lado aparecía ya preparado el recién adquirido pergamino que la acrecida como Reina Fallera Infantil para el 2011. Destacaba también los preciosos centros que sus sucesoras, Sara Ros y Rocío Tormos, le han hecho llegar con unos mensajes de complicidad para el año que comienzan.

Tras disfrutar del manifiesto, todos los presentes alzaron la copa para brindar, en palabras del Alcalde de la ciudad, José Ramón Calpe: “por que tengan un año maravilloso y que todas las podamos acompañar”. Seguidamente, toda la caravana de coches se trasladaba a la Avenida Jaime I, donde está situada la residencia de la Reina Fallera de Burriana, Isabel Lozano.

Nuevamente se aglutinaban los presentes a la entrada de la casa y los medios se afanaban en buscar un hueco para descubrir el ansiado traje, en esta ocasión tejido en seda color Rojo Carmesí, con un acabado perfecto que ha logrado sorprender a todos los presentes que no se esperaban para nada dicha combinación. Al lado del espolín, lucían el segundo traje oficial y el corte para el tercero, que fueron presentados en el salón de plenos días antes. Como en casa de Carlota, también coronaba la exposición el recién adquirido pergamino que la acredita como Reina Fallera y una foto con todas sus compañeras de la Corte de Honor. Acaparaban también la atención las mantellinas y las enaguas que lucirá la Reina, artículos de gran calidad. El centro enviado por la Reina Fallera 2010, Sara Ros, copaba una de las mesas del salón con un mensaje claro para Isabel, que sea ella misma y demuestre lo gran Reina que es, disfrutando al máximo cada momento.

Cabe señalar que las exposiciones han sido elaboradas por Paco Palau e Isabel Romero, utilizando una estructura realizada expresamente para la ocasión por Ramón Luna, padre de Carlota, Reina Fallera Infantil.

Una vez habían sido ya descubiertos los trajes oficiales de las Reinas Falleras, la comitiva pasaba a celebrar lo acontecido con una cena ofrecida por parte de Carlota e Isabel, que a buen seguro será muy amena vista la alegría que inunda estos días previos a la exaltación.

Los trajes al detalle
El espolín Reina de Burriana de Carlota Luna, ha sido tejido en Catalá utilizando seis metales diferentes y oro rosa; los 32 colores de trama que forman el conjunto ofrecen un acabado que resalta sin duda sobre el fondo. La seda del traje de la Reina Fallera, se manda a tintar a Italia, donde se sigue una técnica artesanal que consigue que el color sea único e innovador. El de Isabel Lozano, se teje en la fábrica de Garín 1820, también a la misma calidad de colores pero en una seda color Rojo Carmesí.

Las manteletas son de tul transparente, cordelé y lentejuelas en dos tonalidades de dorado diferentes.

Cintas a todo de los respectivos trajes y con su inicial bordada en el remache.

Aderezos de Art Antic de racimo, en plata chapada en oro, detalle que ha corrido por cuenta de la casa de orfebrería debido al interés en que la Reina de Burriana luzca sus mejores galas.

Tejas diseñadas y forjadas por Miguel Montoya con el reglamentario escudo de Burriana que solo lucen aquellas afortunadas que ocupan el cargo.

El zapato del traje oficial es un modelo muy institucional, con el escudo de la ciudad en la punta y un lazo en la tela del traje; tienen además otro juego para el cuerpo del siglo XVIII lisos de la seda del vestido, una creación de Descans.

El pañolón que abrigará a las Reinas es una creación en exclusiva de Isabel Romero, la indumentarista, realizado a dos caras siendo una de ellas una seda rústica en greca con lentejuelas y tonalidades crema, la otra cara, en el color del fondo del traje adornado con volantes tableados y greca de artesanía.

Los cuerpos del siglo XVIII, con un diseño muy sencillo, están elaborados a partir de la seda del traje y van adornados con un pico de la misma manteleta que el traje oficial.

Las medias de ambas están hechas a mano por una tía de Isabel, Lola, y una amiga de la madre de Carlota, Mercedes Alienza.

Las enaguas de Carlota son de hilo y resultan de elaboración manual, con vainicas y bordado artesanal, fardiquera y chambra han sido bordadas a mano siguiendo diseños de Didal. Todo ello realizado por Alicia Tormos, quien ha sabido añadir unas puntillas de valencién que otorgan una distinción al resultado final.

Las enaguas de Isabel Lozano, con su nombre bordado, son resultado de la apuesta de esta joven por la indumentarista oficial, siendo el modelo elegido uno de sus diseños. Tejida en hilo y con unas fantásticas vainicas, destaca en la parte central una vainica a mano de hojas de guipur que ha costado dos meses de elaborar.

Las mantillas de Carlota son una negra y otra de color claro; la negra es una especie de herencia familiar y la blanda es de granadina en rectangular color crema.