La transformación industrial hacia el coche eléctrico traerá cambios laborales radicales en ciudades como Almussafes

¿Cómo se enfrentan ciudades como Almussafes, que viven exclusivamente del sector de la automoción, al cambio de ciclo industrial al que asiste el sector del automóvil? Hace unas horas hemos asistido a un anuncio que cambia el rumbo de la economía de este sector: la prohibición de vender coches de gasolina y diésel a partir de 2035, algo que acaba de aprobar la Unión Europea y que supone la constatación de un cambio al que venimos asistiendo desde hace tiempo.

Y en este contexto, Almussafes -localidad que concentra prácticamente el 1% del PIB español gracias a la Ford y a todas las empresas que la suministran- tiene mucho que decir. Este miércoles por la mañana los alcaldes de distintas ciudades españolas que viven del mismo sector se han reunido en la localidad de Almussafes en el primer foro nacional del sector Automoción y Componentes.

Son varias las conclusiones y peticiones que estas ciudades lanzan pero todas concluyen que el vehículo eléctrico tiene menos componentes que uno normal y, por tanto, asistimos a una merma progresiva de la necesidad de mano de obra. Esto puede ser un grave problema y por eso es crucial apostar por la formación para reinsertar a estos trabajadores y fomentar la colaboración público-privada para adaptarnos al nuevo contexto.

El sector de la automoción supone el 10% del PIB nacional, origina el 15% de toda la recaudación fiscal nacional y conforma el 9 % del empleo nacional a lo largo de toda la cadena de valor. De hecho, emplea a cerca de dos millones de personas de modo directo e indirecto, con alto nivel de cualificación. 

De ahi, la gran relevancia del encuentro nacional en el que también han participado el conseller de Hacienda y Modelo Económico de la Generalitat Valenciana, Arcadi España; la secretaria autonómica de Economía Sostenible de la Generalitat Valenciana, Empar Martínez; y el vicepresidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana, Vicente Lafuente. 

El alcalde de Almussafes, Toni González, ha hablado de “cambio de ciclo industrial” y ha destacado que se ha de trabajar intensamente para que sea “lo menos doloroso posible”. “La industria tiene que ser una aliada en las políticas de descarbonización y en ese camino itinerante que nos va a llevar a ese cambio en la movilidad”.

Cabe destacar que Almussafes fue el primer municipio de España en diseñar un estudio para atraer nuevas inversiones vinculadas al vehículo eléctrico al sistema industrial de localidad: “Ya éramos plenamente conscientes de que la reconversión del sector era inminente, de que desde el Ayuntamiento, como administración más próxima a los vecinos, teníamos que actuar para proteger al máximo el sector de la automoción en nuestro territorio y consiguientemente minimizar la destrucción de empleo”. 

Los deberes de la administración

Y esto es algo que afecta a todas las ciudades donde se ubican las principales fábricas de automoción y las industrias especializadas en el sector de componentes, como la que han estado hoy en el foro: Martorell (Seat), Villamuriel de Cerrato (Renault), Figueruelas (Stellantis), Vitoria (Mercedes-Benz), Pamplona (proveedores de VW), Martos (VALEO), Ávila (Nissan). Todas ellas generan empleo directo en más de 45.000 trabajadores del sector automoción y componentes. Presencia también de AVIA (Clúster de Automoción y Movilidad Comunitat Valenciana), de las organizaciones sindicales, de las patronales nacionales, de las organizaciones empresariales de fabricantes de automóviles (ANFAC) y componentes (SERNAUTO), de APPI, entre otros.

El Conseller de Hacienda, Arcadi España, ha destacado que de la competitividad de un sector como el de la Automoción y Componentes depende la competitividad global y por eso hay dos puntos clave en esta transformación a la que se enfrenta el sector: “La ocupación y la sostenibilidad”. En este sentido, España reconoce que ahí la administración tiene que ponerse las pilas, por ejemplo con la disponibilidad de puntos de carga para vehículos eléctricos; de incentivos para promover esta transformación; y de ofrecer formación de calidad.