Acuerdo entre la JLF y la comisión de Sant Antoni para fijar la ‘Matxà’ cada tercer fin de semana de enero
El Ayuntamiento de Almassora, a través de la Junta Local de Fiestas (JLF), y la comisión de fiestas de la calle Sant Antoni han acordado fijar las celebraciones en honor al patrón de los animales cada tercer fin de semana de enero. El objetivo de esta medida es facilitar los preparativos a la comisión y, a la vez, “establecer en el calendario esta fecha fija para evitar la confusión acerca del día celebración y que se convierta, con la promoción necesaria, en un referente en la comarca”.
Así ha defendido la medida la concejala de Fiestas, Isladis Falcó, quien ha agradecido a la comisión la voluntad de acuerdo para que la festividad del patrón gane relevancia dentro del calendario de celebraciones de Almassora. De esta forma, la localidad vivirá la próxima ‘Matxà’ y el resto de actos programados con motivo de Sant Antoni el sábado 14 de enero de 2017.
“Debido a que la fecha viene marcada por el santoral, la celebración oscila cada año y en casos como el de 2017 son muchos los vecinos que no saben si los actos se programan previamente al día 17, jornada en honor a Sant Antoni, o el fin de semana siguiente”, recuerda la edil. “Es por ello que el acuerdo con la comisión de la calle permitirá que en adelante no haya confusiones entre los vecinos de Almassora y podamos promocionar el evento con más antelación”, añaden las mismas fuentes.
La comisión de esta calle ubicada en la Vila se ha mostrado favorable a este acuerdo para que su fiesta gane entidad dentro del calendario local de celebraciones. Así, sus integrantes apuran los preparativos para repetir la bendición de las monas y los dulces en la iglesia de la Natividad y los desfiles con animales tanto dentro del casco urbano como en la ruta hacia el paraje de Santa Quitèria.
Los clavarios serán los encargados de custodiar la imagen del santo para las primeras visitas, que comenzarán a llegar el viernes 13 de enero con los alumnos de los colegios que se dirijan hacia la plaza Santa Teresa a depositar la leña de la hoguera. Un día después, la Junta Local de Fiestas entregará a la comisión las monas elaboradas para su bendición en la iglesia de la Natividad, así como el “porrat” popular en el que participarán los vecinos llegada la tarde.
Por su parte, las caballerizas repetirán el itinerario de costumbre a Santa Quitèria para celebrar un almuerzo de hermandad y, al caer la noche, recorrerán el casco urbano antes de asistir a la bendición y recibir la cinta conmemorativa. En último término se producirá el encendido de la monumental hoguera en la plaza Santa Teresa, epicentro del ritual.
