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El toldo instalado sobre la plaza de la Virgen hace 44 años ha sido ya retirado para ser reemplazado por uno nuevo

El toldo instalado sobre la plaza de la Virgen hace 44 años ha sido ya retirado para ser reemplazado por uno nuevo
  • Será menos pesado y no estará sujeto directamente a la cubierta sino a los muros superiores

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El toldo instalado sobre la plaza de la Virgen hace 44 años ha sido ya retirado para ser reemplazado por uno nuevo  - (foto 4)
Los técnicos que trabajan en la actualidad en las obras de rehabilitación de la Basílica han retirado ya el toldo, cables y poleas de la plaza de la Virgen para ser sustituidos por otro mecanismo automático que tendrá como apoyo los cinco muros de la cubierta del templo tras ser restaurada.

De esta manera, el nuevo toldo reemplazará al anterior, instalado en 1967, que “pesaba el doble y estaba dañando la estructura del templo dado que se sujetaba sobre la misma cubierta”, según han indicado hoy a la agencia AVAN el arquitecto Jorge Amigo, director de obra junto al arquitecto técnico Jaime Martínez.

El antiguo toldo será sustituido por otro con “automatismo nuevo, con sistema de seguridad y recogida automático, que tendrá una nueva tela, más permeable y ligera, así como nuevos tensores y cables en un nuevo diseño”, han añadido.

En la actualidad, los técnicos han retirado ya la lona y los antiguos cables de acero. Además, próximamente, cambiarán las poleas “aunque se mantendrán las sujeciones del edificio de enfrente porque son seguras”, han añadido.

El nuevo toldo, de 1.200 metros cuadrados de superficie, será de color beige y azul celeste, más claro que el ahora retirado. Pesará la mitad que el anterior, “no llegando ni al kilo el metro cuadrado, muy poco para lo que es la superficie”, han añadido. Igualmente, “va a tener un sistema de recogida frente a lluvia o velocidades de viento superiores a los 25 kilómetros por hora”.

La idea de la nueva pieza “es que no se apoye sobre la cubierta, como hasta ahora, sino sobre los cinco muros de carga que hay de la fachada, entre el tambor y la cubierta”. Así, se preparará “un apoyo para levantar los anclajes metálicos del toldo”. De esta manera, “quedará anclado a la estructura”. El anterior sistema ha provocado “numerosas grietas y ha ido empujando la fachada durante estos años”, han indicado.

Según los arquitectos, “no será una intervención agresiva y en todo momento la obra será reversible, por lo que el toldo podrá ser sustituido en cualquier momento”.

En 2010, los técnicos realizaron un informe con medición de grietas, con la apertura y cierre del toldo, “viéndose que afectaba de forma importante”.

Las obras para la instalación del nuevo toldo, que “se realizarán simultáneamente a la rehabilitación de la cubierta de la parte recayente del templo a la plaza de la Virgen”, y en un segundo plazo, la de la fachada, está previsto que concluyan el próximo mes de diciembre, “antes de las Navidades”, según han explicado los arquitectos.

Tras la restauración de la cubierta y el toldo, la intervención continuará en la fachada que será pintada del mismo color original, un tono rojizo que es el mismo que los ladrillos del tambor”. Además, serán restaurados los zócalos y puertas.

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