Movilidad Sostenible completa la reurbanización de San Vicente garantizando el espacio de los viandantes

Con la instalación en la madrugada de este jueves 17 de diciembre, de 20 horquillas para aparcamiento de bicicleta y la delimitación de 31 plazas para estacionamiento de motocicletas quedará esta noche completada la reordenación del espacio viario en el tramo recientemente reurbanizado de la Calle San Vicente.

El reparto de plazas, contempla espacios para estacionar bicicletas y motocicletas, aunque no permite el aparcamiento indiscriminado de motocicletas sobre las aceras, que se limitan a los espacios señalados al efecto, impidiéndolo en el resto. Una medida que entrará en vigor mañana jueves, 17 de diciembre.

“Aunque en la reurbanización planeada por el antiguo Equipo de Gobierno no se contemplaba, desde el momento mismo en que se abordó desde nuestra Área cómo debería quedar la calle San Vicente lo primero que se tuvo en cuenta fueron las necesidades de las personas viandantes”, ha explicado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi.

Así, añade, “corregimos pasos de cebra que en el proyecto original hacían a los peatones dar rodeos para convertirlos en los actuales pasos que permiten a las personas circular en recto. Y del mismo modo, aunque en aquel proyecto no se contemplaba ninguna medida que considerara las necesidades de las motoristas pero evitara al tiempo que las nuevas aceras se convirtieran en parkings indiscriminados, hemos realizado esta ordenación del espacio que, siguiendo lo indicado en el artículo 60 de la ordenanza municipal de circulación, habilita algunos espacios específicos para aparcar motos, reserva otros para las necesidades ciclistas (también olvidadas en el proyecto original), y reserva la mayor parte del espacio exclusivamente a los peatones”.

“La mejora que hemos aportado al proyecto original es evidente”, sostiene Grezzi, que ha recordado que “incluso decidimos, en colaboración con la Concejalía de Parques y Jardines, la ampliación de la dimensión de los alcorques, porque la que había originalmente volvía a someter a los árboles a un espacio insuficiente para su correcto crecimiento y desarrollo”. De esta manera, concluye, “la reurbanización de San Vicente queda como nos han reclamado tanto vecinos como comerciantes, especialmente en los últimos días: con las aceras más despejadas para el uso y disfrute de las viandantes, que en definitiva somos todas las personas”.