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Comienzan los trabajos para determinar la calidad medioambiental del suelo en la zona Russafa-Malilla

  • Correspondientes a la fase 1A del Parque Central

Hoy han comenzado los estudios para determinar el grado y el tipo de contaminación de los terrenos donde se ejecutará la fase 1A de las obras de urbanización del Parque Central, en la zona Russafa-Malilla. Tal como se ha dado a conocer desde la Sociedad Valencia Parque Central, la empresa Emgrisa, adjudicataria del contrato, ya ha iniciado los primeros sondeos en el espacio que ocupan las naves de Demetrio Ribes.

Se trata de un servicio denominado de “caracterización exploratoria básica de la calidad ambiental y valoración de riesgos ambientales del subsuelo del Parque Central de Valencia Zona Russafa”, y cuenta con un presupuesto de 52.806,61 euros y un plazo de ejecución de doce meses.

La iniciativa se realiza en cumplimiento de la normativa vigente que se recoge en el Real Decreto 9/2005, el cual establece la relación de actividades potencialmente contaminantes del suelo y los criterios y estándares para la declaración de los suelos contaminados. Los residuos más frecuentes en terrenos donde se han desarrollado actividades relacionadas con el ferrocarril y la automoción suelen ser aceites y carburantes.

En el caso del suelo correspondiente a las naves de Demetrio Ribes, los trabajos consisten en tomar muestras del terreno y analizarlas en laboratorio. Con el resultado de las pruebas de laboratorio se elaborará un informe de Valoración de Riesgos Ambientales por parcela, el cual determinará si es necesario o no efectuar algún tratamiento del terreno para su descontaminación.

Si lo fuera, la firma Emgrisa deberá presentar las alternativas de tratamiento de cada caso, y la Sociedad contratará los servicios de descontaminación que pueden realizarse durante la ejecución de las obras de urbanización. Según la normativa urbanística valenciana, los costes de estudios, proyectos y obras de descontaminación del suelo corresponden al propietario de los terrenos. La Sociedad los financia para poder agilizar y garantizar este trámite que exige la ley en terrenos afectados por determinados usos como, en este caso, el ferroviario

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