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PGE 2015

Silvestre Senent explica ante el Consejo Social de la Ciudad los criterios generales de los presupuestos

    El Teniente de alcalde y Delegado de Hacienda, Silvestre Senent, ha explicado esta mañana a los miembros del Consejo Social de la Ciudad, reunido en el Hemiciclo Municipal bajo la presidencia del concejal Ramón Isidro Sanchis Magriñán, los criterios generales de los Presupuestos Municipales para el año 2015.

    En esta intervención ante los integrantes del Consejo Social de la Ciudad, del que forman parte concejales de los grupos de oposición, representantes sindicales, empresariales y vecinales de Valencia, el Delegado de Hacienda ha destacado que “el presupuesto crece moderadamente respecto al ejercicio anterior”, con aumentos significativos en las partidas destinadas a limpieza y jardines y especialmente significativos en el capítulo de inversiones.

    Además de aumentar las inversiones, se sigue haciendo un esfuerzo por “mantener adecuadamente un nivel de gasto corriente que garantice la prestación de servicios que la ciudad necesita”. Senent, que ha calificado de “participativos”, unos presupuestos en los que “se han tenido en cuenta las propuestas de la Federación de Vecinos tras la consulta con sus representantes”, se ha referido igualmente a la congelación tributaria y contención fiscal.

    Senent ha explicado que el recibo del IBI “se mantiene en las mismas cifras”, ya que el tipo fiscal que el año pasado fue del 0,978 se baja hasta el 0,886 para compensar la subida de los valores catastrales y que el importe del recibo que los ciudadanos deberán abonar sea el mismo del año pasado.

    Otros aspectos destacados en esta reunión para explicar los criterios generales tenidos en cuenta a la hora de elaborar el Presupuesto Municipal del próximo año, que ha durado apenas media hora, se refieren a que la reducción en los gastos de personal y en la carga financiera, tanto por amortizaciones como por disminución del gasto correspondiente a intereses de la deuda, “permite destinar recursos a otros capítulos” y no tener que acudir, “al igual que en los dos ejercicios anteriores”, a la concertación de nuevas operaciones de crédito para financiar las inversiones.

    Los rasgos generales en el presupuesto son ese mantenimiento de una política de contención de gastos de personal, el mantenimiento del mismo nivel de gastos de otros servicios “para poder destinar un mayor porcentaje a cubrir los de limpieza urbana y mantenimiento de jardines”, o la implantación de “un nuevo sistema de racionalización de la organización administrativa que reduzca los costes de tramitación y potencie la administración “sin papeles”.

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