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La Hermandad del Rocío participó en el cortejo de la Semana Santa

El Sant Bult y el Jesús con la Cruz tomaron las calles del Cabanyal en el Lunes Santo

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    Si hay una procesión con triple protagonismo en la Semana Santa Marinera de Valencia esa es la de Jesús con la Cruz en el barrio del Cabanyal en la tarde del Lunes Santo.

    La Real Hermandad de Jesús con la Cruz y Cristo Resucitado, los conocidos como los verdes por el color de sus capas, ha conseguido asentar una magna procesión con la participación del crucificado de Sant Bult, uno de los crucificados más antiguos y venerados del barrio del mismo nombre, y de la Hermanad de Nuestra Señora del Rocio, una de las que con nombre y abolengo pisan Almonte con derecho propio para rendir tributo a la Blanca Paloma.

    Ronquinos, vestas del Descendimiento del Señor del Canyamelar y del Santísimo Cristo del Perdón además de una representación de las cofradías y hermandades formaron el cortejo que partió de la plaza de los Ángeles para encarar el tradicional recorrido de la feligresía bajo el acompañamiento musical de la bandas de cornetas y tambores de la Virgen de los Dolores del Cabanyal y de la Hermandad del Descendimiento de Requena, que pisan con orgullo estos Poblados Marítimos desde las allendes tierras del interior valenciano.

    Y la procesión empezó saliendo el pequeño crucificado de Sant Bult portado por cofrades mientras sus directivos y clavariesa, la amante de las tradiciones valencianas Vicentita Gil, estaban en presidencia. Personajes biblicos, entre quienes se pudo ver a la periodista y cabanyalera, Yolanda Damia, transitaron por las estrechas calles de un barrio que pide a gritos mejoras para un mejor porvenir.

    El Jesús con la Cruz quedó para veneración en una planta baja de la calle José Benlliure 302 y se podrá ver de nuevo en la calle en la noche cerrada del Miércoles Santo a hombros de cofrades y devotos.

    El paso que esculpió el imaginero y escultor valenciano fallecido y olvidado de las instituciones, Salvador Furió. El Hermano Mayor y presidente se sintieron orgullosos del comportamiento de sus cofrades y de lo curtida de la procesión.

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