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Detenida la mujer del servicio de limpieza de una joyería y su hermana

  • Recuperadas la mayor parte de las joyas sustraídas

Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Centro de Valencia han detenido a dos hermanas de 20 y 21 años, de origen colombiano, como presuntas autoras de los delitos de hurto de joyas y receptación. Una de las detenidas era la responsable de la limpieza de la joyería que presuntamente había sustraído las joyas, mientras que su hermana sería la que presuntamente las había vendido en varios establecimientos de compra-venta de oro.

Las investigaciones se iniciaron cuando un propietario de una joyería de Valencia denunció la desaparición de diversas joyas de gran valor, sospechando de la mujer de la limpieza, que en ese momento le acompañaba.

En un acto espontáneo la mujer, al parecer, reconoció que le había sustraído de la joyería algunas piezas de escaso valor, por lo que fue detenida por un presunto delito de hurto.

Durante las investigaciones, los policías averiguaron que la ahora detenida junto con su hermana habían vendido parte de las joyas sustraídas en diferentes casas de compra-venta de oro de Valencia, por lo que tras ser localizada fue detenida como presunta autora de un delito de receptación.

Durante el transcurso de las investigaciones y ante la posibilidad de que hubiera podido sustraer más efectos de la joyería, los investigadores realizaron un registro en el domicilio de las ahora detenidas, interviniéndose diversas joyas que ni su propietario conocía que le habían sido sustraídas. El propietario realizó un balance minucioso, echando a faltar gran cantidad de cadenas, pulseras con diamantes, anillos con piedras preciosas por un valor total de 88.670 euros.

Los investigadores realizaron las inspecciones oportunas en varias casas de compra-venta de oro de Valencia, recuperando gran parte de las joyas sustraídas con un valor de 66.095 euros, siendo entregadas a su propietario.

Las detenidas, sin antecedentes policiales, una de ellas pasó a disposición judicial, mientras que la otra, tras ser oída en declaración fue puesta en libertad, no sin antes ser advertida de la obligación de comparecer ante la Autoridad Judicial cuando para ello fuese requerida.

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