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El Colegio de Economistas de València organiza una jornada para debatir sobre el futuro del turismo, sector hotelero y comercio en la Comunitat Valenciana

El Colegio de Economistas de València organiza una jornada para debatir sobre el futuro del turismo, sector hotelero y comercio en la Comunitat Valenciana
  • Gestionar el presente, combinar la mejora de la situación sanitaria con la de la salud económica y una gestión más eficiente, son algunas de las soluciones que se han expuesto sobre la mesa

  • El 15 por cien del pequeño comercio valenciano cerró en 2020 y el sector turístico ha experimentado caídas de facturación del 80 por cien

  • El avance del proceso de vacunación, entre otros, será clave para la recuperación en los próximos meses, aunque muchas empresas están “con respiración asistida”

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El Colegio de Economistas de València organiza una jornada para debatir sobre el futuro del turismo, sector hotelero y comercio en la Comunitat Valenciana - (foto 2)

El Colegio de Economistas de València, (COEV) ha organizado hoy una mesa redonda para analizar “Los retos de futuro de la economía post COVID-19” en la que representantes de sectores económicos vitales para la Comunitat Valenciana -turismo, comercio y sector hotelero- han debatido sobre la situación actual de emergencia y el papel de las Administraciones Públicas y las medidas y ayudas destinadas a minimizar el impacto de la crisis. La jornada presidida por Juan José Enríquez, Decano del COEV ha contado con la presencia de Antonio Bernabé, Director de Visit Valencia, Pau Pérez Rico, Director de Comunicación y Relaciones Externas de El Corte Inglés, Carlos Boga, Director del Hotel las Arenas y Rafael Torres, Presidente de Confecomerç CV. La jornada ha sido conducida por Eugenio Martín, Director de Arquetipo Influence.

Cómo gestionar un presente en constante cambio porque no se conoce lo qué va a suceder en el futuro es una de las cuestiones que más se ha reiterado en el debate. Porque hablar de un panorama de gestión a medio largo plazo cuando hay variables como las nuevas variantes del COVID-19, la eficacia de las vacunas o elementos del proceso de vacunación que son impredecibles, obliga a adecuar constantemente la gestión en función de la coyuntura.

Cierre de empresas y caídas de la facturación

Es una obviedad que alguna de las medidas sanitarias para atajar la pandemia ha dado de lleno en la línea de flotación de sectores como son el turismo y el comercio. En especial las que afectan a la movilidad de las personas. En este sentido, el turismo ha sido uno de los sectores más perjudicados con efecto arrastre por su importancia en el PIB de España y en especial de la Comunitat Valenciana, que ha experimentado caídas de facturación de hasta el 80 por ciento. En la actualidad la planta hotelera en funcionamiento es solo del 40 por ciento y la restante no ha conseguido abrir la persiana desde marzo del año pasado.

Carlos Boga, Director del Hotel Las Arenas ha destacado la complejidad de gestión en el día a día para un sector con constantes cambios y la necesidad de hacerlo pensando siempre en el presente. “Es necesario ser flexible, una pandemia no permite una mejora de la economía y los esfuerzos se deben al sector de la salud, pero salud además del COVID también son otras cosas, salud mental, social, económica...”. “Mantenemos restricciones para llegar a verano, pero no sabemos si el sector resistirá por el camino”, ha expuesto Carlos Boga.

Otro de los sectores afectados por las restricciones a la movilidad, ha sido sin duda el pequeño comercio, muy atomizado y que carece de pulmón económico. Si bien los comercios esenciales han resistido e incluso crecido en cifra de negocio, aunque no en beneficio, como la alimentación o equipación del hogar, el global ha visto caídas de la facturación del 40 por cien en 2020 y hasta el 80 por cien en los primeros meses de 2021 en la Comunitat Valenciana. “Las primeras perspectivas de recuperación rápida se han visto lastradas, quedarnos en casa ha sido una bofetada en la cara para un sector no digitalizado”, ha manifestado Rafael Torres, Presidente de Confecomerç CV. 

Por su parte, Juan José Enríquez, decano del COEV ha coincidido en que la recuperación será más larga de lo esperado, precisamente por eso reitera que es imprescindible “mantener el tejido productivo para perseguir una recuperación rápida”. “Si cierran empresas es difícil que cuando acabe la pandemia volver a crearlas”. Para ello, insiste en la necesidad de disponer de más recursos públicos para no sufrir ese grave coste. “La recuperación va a ser más difícil en España, al contrario que en otros países de Europa, dada la situación de deuda y déficit que ya existía anteriormente a la pandemia”, ha comentado Enríquez.

El turismo motor de la recuperación

La ciudad de València es un destino turístico urbano que venía de unos muy buenos años ganando cada vez más en importancia y posicionamiento nacional e internacional con un impacto de 4.000 millones y 40.000 empleos indirectos en 2019 y siendo el primer lugar de destino turístico de la CV. Según Antonio Bernabé, Director de Visit Valencia, “el peso del turista internacional era de 70 por cien y las restricciones de movilidad han afectado de lleno con bajadas del 80 por cien de la facturación hotelera y del 90 por cien para las agencias de viajes”. Sin embargo, Bernabé es positivo y apunta que la recuperación turística con efecto arrastre en los próximos meses, será posible si se dan tres factores, que parece van por buen camino: que se acelere el proceso de vacunación, una recuperación económica en paralelo con incremento del gasto, y que se ponga en marcha el certificado verde digital de la UE, clave para el turismo.

Coincide Carlos Boga, con esta idea de que en el momento que se pueda viajar se va a producir un “boom turístico” dado que las personas con capacidad adquisitiva alta han mejorado durante la pandemia y hay sectores que han mantenido el empleo, entre los que se encuentra el público. A pesar de eso resalta que “aunque vemos la luz al final del túnel hay empresas con respiración asistida que van a morir antes de verano”.

Ayudas que se anuncian y llegan a cuentagotas

El papel de la Administración también ha sido objeto de debate, sobre todo en cuanto a la capacidad de respuesta y gestión de las ayudas destinadas a cada uno de los sectores productivos. En este sentido, el presidente de Confecomerç, Rafael Torres ha resaltado el escenario incierto del pequeño comercio con ayudas solo para entre el 2 y 3 por cien de las empresas del sector y además poco cuantiosas. “El comercio no está incluido en el plan Resiste hasta la fecha, en 2020 se han cerrado más del 15 por cien de empresas y puede llegar hasta el 25 si no hay un paquete de ayudas claro”. Se trata de un sector que factura 24.000 millones y que ha recibido en ayudas directas de 120 millones, 2.000 euros por empresa y 200 por trabajador. “Solo en València la subida de impuestos el año pasado fue de 30 millones de euros en comparación”, según Torres.  

Sin embargo, el decano del COEV anima a ser positivos y confiar en una recuperación del consumo y la demanda en cuanto la emergencia sanitaria remita, resaltando la capacidad de transformación de personas, empresas y administraciones. Por su parte, Pau Pérez Rico, Director de Comunicación y Relaciones Externas de El Corte Inglés ha destacado que, “la pandemia nos ha puesto prueba y ha acelerado procesos como la digitalización que abren nuevas oportunidades y serán vitales para la recuperación”. “Se ha producido un salto mayúsculo, la sociedad está cambiando, no hay turismo, no hay horarios, pero el consumidor tiene ganas de comprar”.

En esta línea ha insistido, el director de Visit Valencia “La sostenibilidad, la digitalización y la innovación con creación de valor, serán claves para la reconstrucción”. Además, abre una ventana de esperanza a la próxima recuperación del turismo en la ciudad, con visitantes con ganas de venir a consumir en València y a empresas a invertir en proyectos en la CV.  

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