Catalá exige a Ribó que pida a Puig incluir en el plan metropolitano la llegada de la L-10 a Ciutat Vella y Pont de Fusta
“Es una carencia muy grave en un momento en que Ciutat Vella se acaba de cerrar con sanciones y multas. Este servicio es más que necesario. No podemos amurallar Ciutat Vella y que no se accesible”
Los populares afirman que el plan de la Generalitat no resuelve importantes necesidades de la ciudad de Valencia
La portavoz del Grupo Municipal Popular, María José Catalá, ha exigido al Gobierno de Ribó y PSOE “a instar a la Generalitat a incluir en el Plan de Movilidad Metropolitano de Valencia la prolongación de la L-10 hasta Ciutat Vella y Pont de Fusta, que sería la conexión de los barrios del sur con el norte. El plan deja sin conexión el centro histórico de la ciudad”.
Para Catalá el plan es muy poco ambicioso con la ciudad de Valencia al no contemplar obras tan necesarias como la conexión desde el sur al norte de la ciudad de la línea 10 de FGV que llegará a Nazaret pero que finaliza en la Gran Vía y no llega al centro histórico de la ciudad ni al Pont de Fusta.
Catalá afirma que “desde el PP echamos en falta la finalización de la L-10, Nazaret-estación del Norte- Pont de Fusta y Tossal del Rei. En concreto el tramo que atravesaría y conectaría el centro histórico de Valencia tanto con los barrios del sur como del norte de la ciudad”.
“Es una carencia muy grave en un momento en que Ciutat Vella se acaba de cerrar con sanciones y multas. Este servicio es más que necesario. No podemos amurallar Ciutat Vella y que no se accesible” ha afirmado.
“No se pueden seguir poniendo muros para encerrar el centro histórico y cerrarlo a base de multas. Dotaría a la ciudad de un medio de transporte público potente para su centro histórico, que está sometido actualmente a políticas de movilidad promovidas por Ribó (Compromis) y PSOE que lo están aislando del transporte público con la eliminación de la conexión con el centro de 15 líneas que hasta ahora llegaban”, explica Catalá.
Respecto a las vías de Alta Ocupación, esperamos que el Gobierno de la Generalitat entrar en razón al Gobierno de Ribó y PSOE de Valencia que “quiere reducir a la mitad de los carriles las avenida de Ausiás March, utilizada por más de 120.000 conductores a diario y que es el acceso natural de Valencia hacia Alicante a través de la V-31 o pista de Silla”.
Catalá ha pedido “aparcamientos disuasorios en las entradas sur y norte de la ciudad y se facilite la permeabilidad de la entrada Sur de la ciudad, con más líneas y más frecuencia de la EMT para conectar el sur de la ciudad con el centro”.
