La Basílica de la Virgen cerró sus puertas de madrugada tras recibir a más de 30.000 devotos en el besamanos
La Basílica de la Virgen de los Desamparados ha cerrado sus puertas a la 1,55 horas de esta madrugada al paso del último de los devotos en el besamanos público a la patrona de Valencia, que comenzaba a las 7 horas de la mañana de ayer, miércoles.
Más de 30.000 personas, muchas de las cuales aguardaron en cola hasta tres horas, participaron en el besamanos, que se desarrolló por decimotercer año consecutivo, “en un desfile continuo y ordenado de fieles que se ha prolongado durante 19 horas, y en el que este año ha sido muy significativo el aumento de niños con sus familias y escolares en visitas organizadas por colegios”, según ha indicado a la agencia AVAN fuentes de la Hermandad de Seguidores de la Virgen que ha coordinado el paso de los fieles.
El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, acudió también a participar en el Besamanos a las diez de la noche, y oró en silencio ante la imagen peregrina de la Virgen, acompañado por el rector de la Basílica, Juan Bautista Antón.
Tras ello saludó a numerosos devotos a los que felicitó y agradeció su participación en el besamanos.
